El Vaticano desmintió este miércoles los rumores circulados en las últimas horas a través de las redes sociales sobre el supuesto agravamiento en la salud del Papa emérito Benedicto XVI o, incluso, su muerte.
Las versiones fueron calificadas de “totalmente falsas”, y “toda una mentira” por la vicedirectora de la sala de prensa de la Santa Sede, Paloma García Ovejero.
A través de la aplicación de mensajería Whatsapp se ha replicado una fotografía de Benedicto XVI bastante delgado, junto a una grabación de audio en la cual, un desconocido, asegura que “le ha llegado la noticia” de que el Papa emérito “se ha puesto peor”, que “está muy acabado”, y que se podría ir “a la patria celestial” en los próximos días.
Además, en la red Facebook se ha recuperado una vieja declaración del secretario del pontífice retirado, Georg Ganswein, quien dijo hace tiempo y en referencia al último tramo de la vida de su jefe, que él se estaba “apagando como una vela”.
Estos mensajes provocaron inquietud entre católicos de España, México y Argentina, ningún medio de información tradicional comunicó sobre algún problema de salud de Ratzinger.
Si bien Benedicto XVI ya tiene 90 años y padece los achaques propios de la tercera edad, Ganswein salió al paso de estas versiones y aseguró que el Papa emérito está bien, tras mencionar que incluso su hermano Georg Ratzinger, de 92 años, estuvo con él y juntos pasaron “los mejores días”.
Desde la entrada en vigor de su renuncia al papado, el 28 de febrero de 2013, el Papa emérito se ha mantenido alejado de los actos públicos, aunque recibe constantemente visitas y ha llegado a aparecer en la Basílica de San Pedro en alguna ocasión especial.