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En entrevista para MVS Noticias con Ana Francisca Vega, Luis Miguel González, director editorial de El Economista, afirmó que la decisión de México de imponer aranceles a los autos chinos será un tema complicado que afectará tanto a consumidores como a la economía en general.
Y es que según el experto, los aranceles, un punto caliente en la agenda internacional, están surgiendo como la "nueva moda" entre naciones, "la guerra de aranceles tiende a obligarte a que te alinees en un lado".
En este contexto, el gobierno mexicano busca alinearse con Estados Unidos, país que ya aplica aranceles significativos a productos provenientes de China.
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“Pensamos en China y lo primero que se nos viene a la cabeza son bienes de consumo, desde coches hasta juguetes. Pero esta medida podría elevar precios para los consumidores en México”, explicó González.
¿Cómo afectarán la economía mexicana los aranceles a productos chinos?
El director editorial subrayó que los insumos industriales que México importa de China son clave para mantener competitivas las exportaciones hacia Estados Unidos, especialmente en sectores como la electrónica y la automotriz.
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“China es imbatible en calidad y precio. La pregunta es cuánto tiempo tardaríamos en sustituir esas importaciones imprescindibles”, señaló.
González aclaró que la medida no responde a una ocurrencia, sino a una estrategia deliberada: “Un decreto puede modificarse más fácil que una ley, y esta medida está respaldada legalmente, por lo que no será fácil revertirla”.
Riesgos en el comercio internacional imposición de aranceles
Respecto a las consecuencias para el comercio, González advirtió sobre riesgos inflacionarios y disrupciones en las cadenas de exportación: “Estamos importando de China diez veces más de lo que les vendemos”. Sustituir esa dependencia, agregó, tomará tiempo y enfrentará retos logísticos importantes.
La medida también genera preocupación entre aliados comerciales tradicionales de México, como Corea del Sur, por el impacto en las relaciones internacionales.
“Se trata de lograr un equilibrio entre decisiones inmediatas y correcciones a mediano y largo plazo”, concluyó González.
