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En entrevista con Ana Francisca Vega, para MVS Noticias, Luis Peche Arteaga, analista político en Venezuela, explicó todo sobre Maduro moviliza a cuatro millones de milicianos como respuesta a los destructores enviados por Estados Unidos ante sus costas.
El presidente Nicolás Maduro anunció la movilización de 4.5 millones de milicianos en respuesta al despliegue de destructores por parte de Estados Unidos frente a las costas venezolanas. El anuncio, calificado por analistas como “extravagante” y “exagerado”, busca enviar un mensaje tanto al interior como al exterior del país, en medio de un clima de tensión política y militar.
Reacción a la presión de Washington
Para el analista político, esta medida es una reacción directa a la creciente presión de la administración estadounidense. “Es una reacción… de armar a 4 millones y medio de personas… básicamente civiles con armas”, explicó, recordando que las milicias son un cuerpo paramilitar integrado mayormente por militantes del PSUV, personas mayores y ciudadanos dependientes del gobierno.
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Peche considera que este anuncio pretende generar un efecto psicológico: miedo y cohesión interna. Según el analista, Maduro “no gobierna por ser un gobernante popular, sino a través de la fuerza”, en un país que hoy cuenta con cerca de mil presos políticos, entre civiles y militares.
¿Hay incongruencias?
El analista también subrayó lo que considera una incongruencia: en las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024, Maduro no alcanzó los cuatro millones de votos. Por ello, califica de “absurdo” pensar que podría armar a una cifra aún mayor de personas.
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Además, duda de la capacidad real de equipar a todos esos milicianos: “No creo que estén armados a la perfección… es más un discurso para sembrar temor que una acción militar viable”.
La tensión se intensifica tras el despliegue anunciado por el Comando Sur de Estados Unidos en el mar Caribe, oficialmente enfocado en combatir el narcotráfico. Sin embargo, para Peche, Washington mantiene un doble juego en su política exterior hacia Venezuela.
Para Peche, la movilización masiva de milicianos tiene un objetivo claro: reforzar la imagen de Maduro como un líder de “mano de hierro” y disuadir cualquier intento de organización interna que amenace su continuidad en el poder.
Aunque no considera inminente una caída del régimen, afirma que la presión internacional aumenta y que el apoyo interno a Maduro es cada vez menor, lo que podría influir en la estabilidad política en los próximos meses.
