Audio relacionado
En entrevista para MVS Noticias con Luis Cárdenas, la Dra. Ana Cecilia Uribe, endocrinóloga del Centro Médico ABC, habló sobre Ozempic y medicinas vs la obesidad.
El uso de (Ozempic) ha ganado popularidad en redes sociales y entre figuras públicas como una solución rápida para perder peso. Sin embargo, la Dra. Ana Cecilia Uribe, advierte que este medicamento fue creado originalmente para tratar la diabetes y no debe usarse sin supervisión médica.
¿Cómo se aplica y a quién va dirigido Ozempic?
“Estos medicamentos son análogos del GLP-1, diseñados para controlar la glucosa en personas con diabetes. Su función es aumentar la secreción de insulina después de comer”, explicó. Según la especialista, uno de los efectos secundarios útiles de Ozempic es que “hace que la digestión sea más lenta, lo que genera una sensación de saciedad y reduce el apetito”. Este es inyectable.
Te podría interesar
Aprobado para diabetes, pero útil también en obesidad
Aunque actualmente Ozempic tiene aprobación para tratar la diabetes tipo 2, su capacidad para ayudar a perder peso ha llevado a que se explore su uso en pacientes con obesidad o sobrepeso con comorbilidades. “La Cofepris ya autorizó otros medicamentos similares como Mounjaro y Wegovy para tratamiento de la obesidad en México”, detalló la doctora Uribe.
Además, afirmó que los estudios clínicos muestran resultados positivos tanto en personas con o sin diabetes. “Funcionan bastante bien en la gran mayoría de las personas. Pero su indicación actual es para quienes tienen obesidad o sobrepeso con comorbilidades como apnea del sueño o hígado graso”.
Te podría interesar
Automedicación y riesgos graves
Uno de los principales problemas es el uso indiscriminado de Ozempic sin receta médica. “Las redes sociales y los influencers lo han promovido sin control. La gente lo compra sin estudios previos, y eso es muy riesgoso. Puede causar vómito, diarrea, estreñimiento y, en casos más graves, colecistitis si el paciente tiene piedras en la vesícula”, advirtió.
También subrayó que este tipo de medicamentos pueden provocar pérdida de masa muscular o deficiencias nutricionales si no se acompañan de un plan integral. “No es solo bajar de peso, hay que vigilar el estado general del paciente, desde su química sanguínea hasta su salud mental”, dijo.
En casos donde el paciente sufre de ansiedad, el problema puede persistir incluso si pierde el apetito.
¿Qué pasa al dejar el medicamento?
La Dra. Uribe explicó que suspender el uso de Ozempic sin haber adoptado cambios de estilo de vida puede provocar que el peso perdido se recupere rápidamente. “Si yo quito el medicamento, las personas vuelven a subir de peso porque es un efecto del medicamento. Pero si el paciente cambió sus hábitos, comió mejor, hizo ejercicio y recibió apoyo psicológico, el riesgo de rebote es mucho menor”.
¿Con quién acudir?
Para un tratamiento seguro y eficaz, la especialista recomienda acudir con expertos. “Idealmente con un endocrinólogo, aunque algunos internistas y bariatras también tienen experiencia en estos casos. Lo importante es tener supervisión médica desde el inicio”.
El llamado de la especialista es claro: no se debe subestimar el impacto médico del uso de medicamentos como Ozempic. Aunque puede ser una herramienta útil, debe formar parte de un tratamiento integral y personalizado, siempre bajo vigilancia profesional.