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En entrevista para MVS Noticias con Luis Cárdenas, Laura Ballesteros, diputada de MC, Arturo Ávila, diputado de Morena y Federico Doring, diputado del PAN, hablaron sobre Trump ordena desplegar la Guardia Nacional en Washington y toma el control de la policía local.
La reciente orden de Donald Trump para desplegar la Guardia Nacional en Washington y tomar control de la policía local ha encendido alertas en México. Legisladores de diferentes partidos coincidieron en rechazar cualquier intento de intervención extranjera y expresaron su preocupación por la militarización de Trump y sus implicaciones para la soberanía nacional.
La diputada de Movimiento Ciudadano (MC), Laura Ballesteros, advirtió que este tipo de medidas por parte del presidente estadounidense representan un riesgo para la estabilidad en la región.
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“Lo más importante es defender la soberanía de nuestro país. Cada vez que hay un amago de Trump, las consecuencias vienen”, aseguró.
Ballesteros señaló que su bancada ha sido crítica de la militarización interna y que tampoco respaldarán iniciativas militares externas que puedan poner en peligro a la población o generar tensiones bilaterales.
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“No vamos a estar de acuerdo con el amago militar de Trump. Mete militares para callar protestas contra sus medidas a migrantes”, declaró. “Quien esté defendiendo la unidad militarizada, no estamos de acuerdo con la militarización de Trump”, enfatizó.
Arturo Ávila: “Es inconstitucional y va contra la ONU”
Por su parte, Arturo Ávila, diputado de Morena, señaló que cualquier intento de intervención militar extranjera en México violaría principios constitucionales y acuerdos internacionales.
“Hay que enseñarle unas clases de derecho a Federico. No se permite la intervención de un gobierno extranjero, es anticonstitucional”, dijo en tono crítico.
Ávila subrayó que la Carta de las Naciones Unidas prohíbe expresamente el uso de la fuerza entre naciones y que México ha demostrado capacidad de colaboración con Estados Unidos sin necesidad de imposiciones unilaterales.
“El Gobierno de México tiene una de las mejores coordinaciones con EU. Estamos por firmar un acuerdo en materia de seguridad”, añadió.
Además, criticó duramente a figuras de la oposición que, desde medios internacionales, han acusado sin pruebas al actual gobierno mexicano. “Vemos a Lilly Téllez hablando mal de México en cadenas internacionales, diciendo que la presidenta está vinculada con actividades criminales. Eso manda mensajes graves a un segmento ultra conservador de EU”, advirtió.
Federico Döring: No a la intervención directa de EU
Desde el PAN, Federico Döring coincidió en que cualquier operación militar directa por parte de Estados Unidos sería inaceptable. Aunque reconoció la importancia de la colaboración binacional, insistió en que las acciones deben estar siempre encabezadas por el gobierno mexicano.
“No tendría ningún sentido que EU tenga operaciones directas. No nos hagamos tarugos: si hacen justicia por su propia mano, va a caer en juzgados”, apuntó.
Döring también expresó preocupación por la desconfianza que algunas autoridades estadounidenses han manifestado sobre la eficacia del sistema judicial mexicano.
Rechazo generalizado
Pese a sus diferencias partidistas, los tres legisladores coincidieron en que México debe rechazar cualquier forma de intervención militar estadounidense disfrazada de cooperación.
“Nosotros hemos estado en contra de la militarización en nuestro país, y tampoco vamos a aceptar la militarización de Trump como método de presión internacional”, concluyó Ballesteros.
La militarización de Trump se perfila como un tema central en la agenda bilateral, en un contexto donde la defensa de la soberanía mexicana será cada vez más importante.