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En entrevista para MVS Noticias con Luis Cárdenas, el abogado Gabriel Regino habló sobre la demanda por difamación que Claudia Sheinbaum interpondrá contra el abogado de Ovidio Guzmán.
Respecto a la posibilidad de que el Estado mexicano demande a Jeffrey Lichtman por los comentarios emitidos desde territorio estadounidense, Regino explicó que, aunque una demanda es técnicamente viable en México por daño moral, no sería efectiva debido a la falta de jurisdicción sobre el abogado en EE. UU. y la protección que brinda la Primera Enmienda estadounidense a la libertad de expresión. Por ello, considera que cualquier demanda tendría un carácter simbólico y sin posibilidades reales de ejecución.
"¿Que se pueda hacer una demanda? Sí, claro que se puede hacer una demanda, pero creo que no es el camino adecuado para zanjar un tema que nunca debió haber sido abordado desde la Presidencia de la República", afirmó Regino. "No era la presidenta quien tendría que haber salido a hacer los señalamientos que realizó, para eso tiene un vasto equipo, un gabinete muy amplio", agregó.
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El abogado afirmó que se trata de "una acción meramente simbólica que no va a conducir a nada", aunque "si esta demanda empieza su curso por allá, después de septiembre, cuando estén los jueces electos, con una corte afín ideológicamente, es posible que haya una sentencia que diga 'condenamos a Lichtman al pago de la reparación del daño moral por 10 millones de pesos', por ejemplo".
Sin embargo, explicó que "nunca podría ser ejecutable. ¿Por qué? Porque en los Estados Unidos, para que se pueda ejecutar una sentencia de un país extranjero, se tiene que revisar que esa sentencia no viole el debido proceso ni vaya en contra de las enmiendas. Y una de las principales libertades que protege la Primera Enmienda es la libertad de discurso. Entonces, la demanda que se haga contra este abogado no rendirá frutos de ninguna manera".
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Cómo Estados Unidos usa a Ovidio Guzmán en la lucha contra el crimen organizado
Sobre el estatus de Ovidio Guzmán, Regino detalla que fue extraditado hace meses a Estados Unidos y que, desde entonces, ha mantenido negociaciones con la fiscalía estadounidense para convertirse en testigo protegido, aportando información clave sobre redes de crimen organizado. "Él (Ovidio) ya cantó, él cantó desde hace muchos meses. Estados Unidos empezó a comprobar sus dichos", aseguró.
"Estados Unidos tiene una gran cantidad de información a nivel internacional de cómo se maneja el crimen organizado y tiene una oficina poderosísima dentro de la Fiscalía General del Estado que acumula todos los casos que se vertebran en torno al crimen organizado", indicó Regino.
Este estatus explicaría el trato especial que recibió su familia en la frontera y su traslado a un lugar seguro bajo custodia de la Agencia de Marshals, en lugar de permanecer en prisión.
El abogado también expone que otros personajes relacionados, como Joaquín Guzmán López y Ismael "El Mayo" Zambada, estarían en procesos similares de negociación con las autoridades estadounidenses, lo que podría fortalecer la construcción de casos judiciales en EE. UU. contra figuras del crimen organizado y posibles actores políticos o empresariales vinculados a redes criminales transnacionales.
Finalmente, Regino señala que esta situación puede derivar en filtraciones y acciones judiciales en ambos países, generando tensiones en la relación bilateral. Asimismo, subraya que el objetivo político y estratégico del gobierno estadounidense en este escenario busca reforzar su hegemonía y proteger sus intereses frente a actores con ideologías y actividades que considera adversas.