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En su colaboración para MVS Noticias con Luis Cárdenas, Pedro Tello, consultor en economía, hablará sobre el retroceso en mayo de las exportaciones de productos minerales, agropecuarios e industriales.
El Banco de México anunció un recorte de 50 puntos base a la tasa de interés de referencia, una medida que, si bien podría beneficiar a los consumidores con créditos a tasa variable, ha despertado inquietud entre analistas por su posible impacto en la economía nacional. Así lo señaló el analista económico Pedro Tello.
El ajuste en la tasa se traduce en una disminución del costo para quienes tienen créditos hipotecarios, personales o automotrices con tasas variables. Sin embargo, esta decisión se da en un contexto poco favorable: mientras que en diciembre de 2024 la inflación cerró en 3.9%, para junio de 2025 ya se ubica en 4.51%.
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Ante este repunte inflacionario, la reducción en la tasa de interés ha sido vista como un movimiento contradictorio, que podría debilitar la eficacia del Banco de México para contener la inflación. Incluso, existe el riesgo de que empresarios aprovechen esta señal para aumentar precios, lo cual afectaría aún más el poder adquisitivo de la población.
"La buena noticia es que vamos a pagar menos tasa de interés por los créditos contratados a tasa variable. La no tan buena noticia es que esta decisión del Banco de México alteró o más bien incentivó todavía más la polémica acerca de qué va a pasar con las tasas de interés, qué va a pasar con la inflación en los meses por venir", señaló Pedro Tello.
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"Y yo diría que la noticia peor es que esto probablemente puede generar que algunos empresarios empiecen a encontrar que el Banco de México está haciendo de lado la medicina necesaria para poder mantener la economía mexicana a flote, y esto les daría a ellos margen para poder incrementar los precios de sus bienes y de sus servicios, y eso ciertamente no es una buena noticia para todos", agregó.
México entre la baja de tasas y el freno exportador
A esta preocupación se suma un nuevo foco de alerta: el retroceso de las exportaciones mexicanas. En los últimos dos meses, las exportaciones no petroleras, incluyendo las manufacturas, productos agropecuarios y minerales, han mostrado una caída significativa. Este fenómeno representa un golpe para el único motor económico que había mantenido cierta estabilidad: el sector exportador.
La caída coincide con cambios recientes en la política comercial de Estados Unidos, principal socio comercial de México. Esta tendencia negativa en las exportaciones, combinada con un trimestre económico en números rojos, podría profundizar la desaceleración que enfrenta el país.
"Las exportaciones no petroleras retrocedieron en los últimos dos meses, y lo mismo ocurrió con las exportaciones de la industria manufacturera, que es la más importante generadora de divisas vía exportaciones distintas al petróleo por parte de la economía nacional. Pero también retrocedieron las exportaciones de productos agropecuarios y también las de productos minerales", indicó Tello Villagrán.
"Así que, ojo, porque el único motor de nuestra economía que había trabajado eficientemente ya da muestras de agotamiento, que sin duda alguna van a alterar o van a influir de manera poco favorable el comportamiento de una economía como la mexicana que cerró el primer trimestre con números rojos", concluyó.
La combinación de factores —política monetaria incierta, inflación al alza y caída en exportaciones— configura un escenario complejo para los próximos meses. La estabilidad económica de México enfrenta presiones tanto internas como externas, mientras analistas advierten sobre la necesidad de decisiones más consistentes por parte del Banco de México.