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En medio de los recientes cambios impulsados desde el gobierno federal y por Morena, como la reforma judicial y el uso de recursos públicos como las cuentas inactivas de INFONAVIT, surge una nueva polémica: la intención de eliminar la autonomía de las fiscalías estatales y federal para regresarlas al control directo de los poderes ejecutivos.
Para el abogado penalista y profesor de la UNAM, Gabriel Regino, este movimiento no es una simple modificación administrativa, sino un paso más hacia la concentración de poder en manos del Ejecutivo. En entrevista con MVS Noticias, el especialista expuso con firmeza su análisis sobre los riesgos estructurales que esto representa para el sistema de justicia en México.
“No se trata de maquillaje, es control político”
Regino fue enfático al señalar que la propuesta para eliminar la autonomía de las fiscalías no tiene como objetivo mejorar su funcionamiento, sino consolidar el control del poder:
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“No se trata de una propuesta de maquillaje, sino se trata de una propuesta de control político para terminar por tener todos los instrumentos de control social y punitivo a cargo de la oficina de los ejecutivos estatales y de la oficina del ejecutivo federal. De eso se trata, de tener el control.”
En ese sentido, advierte que esto no resolverá los problemas de ineficiencia que enfrentan las fiscalías, como la impunidad o la falta de resultados en investigaciones: “Que funcionen las fiscalías no se soluciona con esto bajo ninguna circunstancia.”
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La autonomía, una simulación que podría desaparecer
Si bien reconoce que la autonomía de las fiscalías ha sido más formal que real, Regino sostiene que eliminarla por completo solo agravará los problemas actuales:
“La autonomía era una especie de simulación… y volverlas a poner bajo la égida, bajo la dirección, bajo el mando de los poderes ejecutivos, como era en antaño, es como una especie de cierre de candado para tener un sistema de control absoluto.”
Desde su perspectiva, ya se ha avanzado en la eliminación de organismos incómodos al poder, como el Instituto Nacional de Transparencia (INAI), lo cual forma parte de una estrategia más amplia: “Efectivamente han ido cooptando y eliminando instituciones que necesitan tener y eliminando las que les eran incómodas.”
¿Por qué son importantes las fiscalías? El nuevo objeto de destrucción de Morena
Más allá del debate político, Regino pone el foco en una carencia estructural grave: el perfil de quienes integran y dirigen las fiscalías. Señala que muchas veces son abogados sin formación en investigación criminal, lo que reduce su efectividad:
“Quienes dirigen las investigaciones criminales en México son licenciadas o licenciados en Derecho que en sus carreras nunca llevaron una sola materia en la cual les enseñasen a investigar crímenes. Por lo tanto carecen de todo el conocimiento científico forense para ser criminalistas.”