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En entrevista para MVS Noticias con Luis Cárdenas, Javier Ávila Aguilar, sacerdote jesuita, habló sobre el funeral del papa Francisco.
“Es un momento lleno de esperanza porque creemos en la resurrección”, afirmó Ávila Aguilar. “El modelo y ejemplo del testimonio del papa es grande. Empezó a hablar de temas que nadie hablaba, lo hizo con una enorme libertad, eso lo fortaleció mucho”.
Un pontificado fuera de lo convencional
Desde el inicio de su papado, Francisco desafió los moldes tradicionales del Vaticano al poner sobre la mesa temas sociales, políticos y espirituales que antes permanecían al margen del discurso oficial. Para el padre Ávila, esa valentía tiene una raíz muy clara: su identidad jesuita.
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“Eso es parte de la Compañía de Jesús, con una profunda esperanza y firmeza que no la dobla nadie”, comentó.
Cuando se le preguntó si el papa Francisco era de izquierda, Ávila fue enfático: “Más que de izquierda, era profundamente evangélico. Si a Jesús lo consideran de izquierda, pues sí, pero Francisco siguió al 100 por ciento la línea evangélica”.
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Justicia, diálogo y verdad: su legado
El mensaje social del papa Francisco también fue uno de sus pilares más sólidos. Según Ávila Aguilar, su ejemplo inspira a continuar trabajando por un mundo más justo, guiados por valores profundamente humanos y cristianos.
“Creo que con la vida de Francisco se fortalece nuestra opción en favor de los demás”, declaró el sacerdote.
En un contexto donde los conflictos sociales y políticos suelen polarizar, el enfoque del papa se centró siempre en el diálogo y la reconciliación. “La justicia no se hace con abrazos y tampoco con balazos, hay muchos caminos: la verdad, el diálogo, la apertura. Estos temas los vivió Francisco”, remarcó Ávila Aguilar.
Con su cercanía a los más necesitados, su denuncia constante contra la desigualdad y su apertura a debatir incluso dentro de la misma Iglesia, el papa Francisco deja un legado que trasciende fronteras y etiquetas ideológicas. Su muerte, aunque dolorosa, representa para muchos una semilla de cambio y renovación espiritual.