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En entrevista con Manuel López San Martin para MVS Noticias, el periodista Ezra Shabot habló sobre el frustrado atentado contra la embajadora de Israel en México.
En una reciente entrevista, el analista en temas internacionales Ezra Shabot planteó un escenario complejo sobre la relación entre México, Israel e Irán. Según Shabot, el gobierno iraní no solo ha mostrado interés en desestabilizar a Israel, sino que ha intentado llevar a cabo atentados en otros países, incluidos varios en Argentina en los años 90.
En esta ocasión, el foco se pone sobre un plan de atentado frustrado en contra de la embajadora de Israel en México, lo que genera múltiples interrogantes sobre la política exterior mexicana.
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"Esto tiene que ver, por supuesto, con el conflicto del Medio Oriente. Irán no reconoce a Israel y ha sido acusado por la comunidad internacional de varios atentados", afirmó el analista con Manuel López San Martín.
Este hecho fue uno de los tópicos más destacados en el diálogo, en el que se reveló la supuesta colaboración entre México y Estados Unidos para neutralizar un complot orquestado desde Caracas.
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Israel: Ataque frustrado y sus implicaciones
La información sobre el intento de ataque fue filtrada desde el gobierno estadounidense, donde se dijo que, gracias a la intervención mexicana, el ataque había sido contenido. Sin embargo, la reacción de la administración mexicana fue desconcertante.
"México no tenía idea de lo que les estaban hablando", sostuvo Shabot, refiriéndose al tardío comunicado del gobierno mexicano que desestimó la noticia del atentado.
"La bronca está en el manejo de la política exterior mexicana. Estás jugando a tratar de quedar bien con los americanos y cerrar la frontera para la migración, y por otro lado, no vas a ir a las famosas cumbres porque no invitaron a Cuba y Venezuela". Esto evidencia una tensión significativa dentro de la estrategia de México en el ámbito internacional.
Una relación complicada
Lo que sorprende es que el gobierno israelí agradeció a México por su intervención en la frustración del atentado, generando un extrañamiento en la administración mexicana, que insistió en que no tenían conocimiento de tal intento. En palabras de Shabot, el gobierno mexicano se encuentra en un aprieto: "Estás jugando con un pie en cada lado, tratando de ganar reconocimiento, pero exponiéndote a críticas en ambos frentes".
El analista subrayó que la relación con Estados Unidos parece ser prioritaria, pero la mezcla de intereses genera un escenario confuso. La comunidad internacional mira con atención cómo se desarrollan estos acontecimientos, ya que su desenlace podría tener repercusiones en la política interna y externa de México.
La atención ahora se centra en cómo manejará el gobierno mexicano esta situación, que ha dejado a muchos cuestionándose la consistencia de su política de seguridad y relaciones exteriores.