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En entrevista con Pamela Cerdeira, para MVS Noticias, Juan Martín Pérez, coordinador de Tejiendo Redes Infancia en América y El Caribe, habló del narcotráfico se acerca cada vez más a los jóvenes.
En los últimos años, un alarmante incremento en el reclutamiento de menores para actividades criminales en México ha generado preocupación. Juan Martín Pérez, coordinador de Tejiendo Redes Infancia en América y el Caribe, explicó las cifras y patrones de este fenómeno que está afectando a miles de adolescentes en el país.
¿Por qué las cifras son preocupantes?
Desde 2010, el estudio de la problemática ha revelado casos impactantes, como el de "El Ponchis", un joven que se convirtió en símbolo de esta crisis. "Los grupos criminales buscan nuevos 'soldados', lo que incrementa el reclutamiento de menores", advirtió Juan Martín.
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En el último sexenio, se registraron aproximadamente 7 mil adolescentes desaparecidos, mientras que solo en lo que va de este año se han documentado 2 mil 900 casos. "Esto pone de manifiesto una creciente desaparición, con alta probabilidad asociada al reclutamiento".
La cercanía a focos de confrontación, como Tamaulipas, Guerrero y el Estado de México, ha convertido a muchas regiones en caldo de cultivo para estos delitos. Además, Juan Martín subrayó que "el reclutamiento no es tipificado como un delito en la legislación mexicana, lo cual es una gran omisión del Estado".
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¿Cuáles son los canales de reclutamiento?
Las redes sociales y los videojuegos se han vuelto plataformas comunes a través de las cuales los criminales contactan a los jóvenes en busca de nuevos reclutas. "Es un fenómeno que crece y se adapta", añadió Martín, resaltando la necesidad urgente de acciones preventivas.
"Más de 150,000 adolescentes están en riesgo, y el Estado no ha implementado respuestas adecuadas". A pesar de la gravedad de la situación, poco se hace.
Las denuncias de las víctimas han aumentado, pero Juan Martín recalca que "es fundamental informar al público sobre esta realidad y crear campañas masivas de concientización".
El desafío es enorme, pero la necesidad de proteger a los niños y jóvenes del país es inmediata. "Es triste ver cómo, en medio de cifras alarmantes y testimonios desgarradores, seguimos sin acciones concretas".
La comunidad y las autoridades deben unirse en un esfuerzo concertado para erradicar esta problemática y garantizar un futuro seguro para todos los menores en México.