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En entrevista con Pamela Cerdeira, para MVS Noticias, Sergio Aguayo, investigador de El Colegio de México habló del estudio ‘Urnas y Tumbas’ sobre el panorama de violencia en las elecciones.
Basado en los 32 asesinatos de aspirantes a cargos de elección popular en las elecciones de 2021, el Seminario Violencia y Paz de El Colegio de México publicó un estudio donde revela datos interesantes y advierte que la violencia electoral podría incrementar.
El investigador detalló que de acuerdo con el estudio, en el 2021 hubo 32 asesinatos y de esos 32 asesinatos, 31 fueron a candidatos a regidurías o presidencias municipales, lo que nos muestra que la protección ‘está en otras partes’, pues ninguno fue candidato a diputado federal o contra un candidato a gobernador, “es decir, van a proteger a quienes no lo necesitan”.
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“Es casi imposible, virtualmente imposible, proteger a más de 100 mil personas, aproximadamente, y no hay planes de prevención de estos atentados, porque no hay, según en el estudio que ya presentamos, el día de hoy no hay advertencia en ningún caso, solo llegan matan, ejecutan, 31 fueron en la vía pública al estilo mafioso, y la mayoría se dieron en el mes de marzo”.
Agregó que en estos casos la impunidad es uno de los rasgos característicos detectados por los investigadores de este proyecto en los asesinatos registrados en los comicios de hace tres años, la cual ‘es total’.
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“Es posible que marzo sea un mes particularmente difícil, esto sucedió en el 2021, que es lo que reviste el estudio: que fue el peor mes desde 30 años. Para este año, vemos un programa de seguimiento de estudio para ver de qué manera podemos anticipar la violencia… pero lo vemos es un panorama inquietante y digno de preocuparse más por los partidos políticos, las autoridades locales, el gobierno federal y los gobiernos locales”.
El investigador de El Colegio de México, puntualizó que al igual que en el 21, la violencia está creciendo este mes y podrá alcanzar su pico en marzo y luego va a caer, cuando ya nombran definitivamente el candidato, “porque lo que quiere el crimen organizado es intervenir e impedir que llegue alguien o lograr que el nombre de alguien llegue y es ahí donde entran los muertos”.