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En entrevista con Pamela Cerdeira, para MVS Noticias, Mónica Hernández, escritora y columnista de Opinión 51, detalló que escribir perjudica seriamente la salud, hoy habló del libro 'Cometierra' y la censura que enfrenta.
En un nuevo capítulo de la lucha contra la censura y la violencia de género, la novela "Cometierra" de la escritora argentina Dolores Reyes ha sido prohibida en las escuelas de su país.
Esta obra, que aborda de manera cruda y realista el tema de los feminicidios, motivo por el cual la escritora argentina Dolores Reyes ha enfrentado amenazas de muerte y críticas, mientras genera debates encendidos sobre la censura.
‘Cometierra’ narra la historia de una joven con un don sobrenatural: al ingerir la tierra del lugar donde alguien ha muerto, puede reconstruir cómo ocurrieron los crímenes. Enfocándose en feminicidios, el libro explora la violencia de género desde un ángulo novedoso y profundamente humano.
A pesar de su recepción positiva en círculos literarios, esta obra fue prohibida en algunas escuelas bajo la acusación de ser “pornográfica”, relegando su valor social a un segundo plano.
Mónica Hernández, escritora y columnista de Opinión 51, señaló que esta censura es un intento de silenciar temas incómodos. “A qué le tienen miedo, ¿a que las muertas ya no van a hablar? Este libro toca una herida abierta que debemos discutir, no censurar”, expresó.
El ataque a la obra de Reyes no es un caso aislado; refleja una tendencia en la que gobiernos y sectores conservadores buscan suprimir narrativas que desafían el statu quo. Sin embargo, este intento de silenciamiento ha generado un movimiento de sororidad y resistencia literaria.
Escritoras como Claudia Piñeiro, junto con numerosos lectores, han organizado lecturas conjuntas de Cometierra, promoviendo la difusión del libro prohibido como un acto de protesta.
“Leer es una maravillosa manera de protestar contra la censura. Siempre que hay algo censurado, es garantía de éxito. Hagamos ruido, leamos y hagamos nuestra propia opinión”, afirmó.
La censura literaria es un ataque a la libertad de expresión y un intento de acallar debates cruciales. Frente a esto, Hernández invita a lectores a apoyar a Dolores Reyes y su obra: “No cortemos este tipo de voces; al contrario, leamos, discutamos y hagamos nuestras propias opiniones”, leamos ‘Cometierra’.