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En entrevista con Adrián Jiménez en ausencia de Pamela Cerdeira, el periodista Ezra Shabot habla la reelección de Rosario Piedra como presidenta de la CNDH.
La reciente reelección de Rosario Piedra Ibarra como presidenta de la Comisión Nacional los Derechos Humanos (CNDH) generó un intenso debate en la esfera política mexicana. Ezra Shabot, periodista y analista, expone que este nombramiento refleja no solo una fuerte injerencia política, sino también la debilidad de una presidencia que no cuenta con el control total del poder.
“A pesar de la fortaleza aparente de la presidencia, la realidad es que ciertos hilos del poder parecen manejarse desde fuera del Palacio Nacional”, afirmó Shabot en su análisis sobre el tema.
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De acuerdo con el periodista, el Senado y la Cámara de Diputados parecen seguir instrucciones que provienen de una figura “lejana, pero presente”, en referencia al expresidente Andrés Manuel López Obrador, quien aún parece mantener influencia en ciertas decisiones estratégicas, como la de la CNDH.
Detalló que la reelección de Rosario Piedra compromete la autonomía de la presidencia de Claudia Sheinbaum y plantea dudas sobre la capacidad de la mandataria para tomar decisiones sin presiones externas.
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“Es un indicio de que Sheinbaum, aunque tiene el respaldo de su partido y la mayoría en ambas cámaras, sigue enfrentándose a un poder paralelo (…) habla de la influencia que se sigue ejerciendo desde la esfera de AMLO”.
Esta estructura de poder dual, dijo, sugiere que existen dos focos de autoridad: uno en Palacio Nacional y otro desde un ámbito extrainstitucional que sigue condicionando decisiones cruciales.
Escucha el análisis del periodista Ezra Shabot que habló de la reelección de Rosario Piedra como presidenta de la CNDH.