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En su colaboración con Luis Cárdenas para la Primera Emisión de MVS Noticias, Salvador Mejía, experto en temas de lavado de dinero y del crimen organizado, habló sobre el enfrentamiento en Nuevo Laredo, Tamaulipas, que dejó cinco jóvenes muertos tras recibir disparos del Ejército mexicano.
“Hay ONGs que ya lo están clasificando como masacre, pero hay varias posturas, también tenemos que escuchar a los militares”, dijo el especialista.
El comentarista también explicó que todas las autoridades “cayeron en silencio” y cuestionó si los jóvenes eran parte del crimen organizado.
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“¿El narco qué te ofrece? Te ofrece el espejito de ‘vente conmigo y vas a estar manejando una camioneta Silverado’, como la que vimos en los videos, pero lo que no te dicen es que puedes terminar abatido por el Ejército”, mencionó.
Uno de los militares es un supuesto subteniente
Salvador Mejía igual comentó que “todo parece indicar” que el militar con mayor jerarquía dentro del grupo que abatió a los jóvenes en Nuevo Laredo es un supuesto subteniente.
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“No cualquiera se hubiera aventado a disparar al suelo”, manifestó el experto en seguridad.
Enseguida, mencionó que los medios dicen que fue una masacre, pero que “es lo último que tenemos que hacer”, ya que debemos cuidar al Ejército.
“Esto ocurre únicamente porque lanzamos al Ejército a las calles sin las herramientas jurídicas necesarias”, expresó.
Sumado a lo anterior, dijo que ninguna de las políticas ha servido para bajar la delincuencia ni para proteger al ejército.
“¿Por qué tomar una pistola? ¿Una 45 y aventar los tiros teniendo un rifle? Y me da una respuesta mi fuente, con todo y todo, se les salió de control. A los militares se les salió de control el operativo”, dijo.
También cuestionó dónde quedó el presidente municipal, la policía municipal, la policía de proximidad y la Guardia Nacional.
“Nuestro Ejército no está diseñado para labores policiacas. Está diseñado para entre otras cosas realizar operativos quirúrgicos, por ejemplo, para detener a ‘El Ratón’”, expresó.
Salvador Mejía aclaró que no hay manera de que el Ejército siga realizando labores policiacas y que sigue sin haber escuelas suficientes ni trabajos bien renumerados para evitar hechos como el ataque en Nuevo Laredo contra seis jóvenes, de los cuales cinco murieron.