A 48 años de distancia y como ocurre regularmente con los famosos, la muerte de Elvis Presley sigue siendo todo un enigma para muchos, que así como creen que sigue vivo otros piensan que no murió de un infarto, sino de un golpe en la cabeza, una sobredosis o quizá hasta que fue asesinado, por lo que en su pleno aniversario luctuoso aquí te decimos los misterios que escondió la autopsia al Rey del Rock.
Considerado como el primer ídolo de masas y el gran precursor del nacimiento del fenómeno fan como tal, la trayectoria musical de Elvis Presley rompió moldes y su popularidad trascendió fronteras, por lo que mucho se ha dicho de los misterios respecto a la autopsia de su muerte a sus apenas 42 año en Graceland, su icónica mansión.
¿Cuándo y dónde murió Elvis Presley?
El 16 de agosto de 1977 a las 15:30 horas, Elvis Presley fue alcanzado por la muerte en su mansión del 3754 del Elvis Presley Boulevard, en Memphis, Tennessee, donde su pareja Ginger Alden lo encontró tirado en el suelo del baño del dormitorio principal, boca abajo. El equipo de reanimación de la ambulancia intentó devolverle a la vida, pero sin éxito, por lo que su cuerpo sin vida fue trasladado al Baptist Memorial Hospital de Memphis, en el que hasta 10 médicos le practicaron una muy polémica autopsia que duró cuatro horas y estuvo llena de misterios.
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Desde entonces una serie de mitos, especulaciones y rumores ha rodeado el fallecimiento del también conocido como El Rey del Rock, aunque la teoría más extendida y aceptada es que sufrió un paro cardíaco, pues se sabía que su salud cardiovascular era precaria, además de que los médicos detectaron varias enfermedades que tenía como la diabetes y un trastorno inflamatorio autoinmune.
Los misterios que rodean la muerte de Elvis Presley
Teniendo en cuenta el delicado estado de salud del artista, sorprenden los resultados de las pruebas que se hicieron después de su fallecimiento, pues las muestras de sangre, orina y tejidos detectaron la presencia de 10 sustancias distintas, entre las que se encontraban varios tipos de opiáceos, además de que su corazón tenía el doble de su tamaño normal y sufría de eosinofilia y proteína C reactiva elevada. A sus enfermedades se le añadía el peso (casi 130 kilos), que era una enorme carga para sus órganos.
A su médico, George Nichopoulos, se le acusó incluso de asesinato por presentarse cuando ya había comenzado la necropsia, pero finalmente se le declaró no culpable al prescribirle solo dos de las 10 sustancias detectadas. Incluso se especula que murió por una reacción autoinmune provocada por un traumatismo craneoencefálico repetido y de los cuales el más grave se produjo en Bel Air, Los Ángeles, en 1967, justo antes de filmar Clambake, lo que descartaría las teorías de asesinato y hasta posible suicido (tropezó con el cable de un televisor en el baño, perdió el equilibrio y se golpeó la cabeza contra la bañera de porcelana).
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