El 30 de mayo de 1976, uno de los nombres más emblemáticos del cine mexicano, Emilio “El Indio” Fernández, protagonizó un episodio oscuro y trágico que marcaría el ocaso de su vida.
Mientras buscaba locaciones para su película México Norte en la población de Viesca, Coahuila, el legendario cineasta se vio envuelto en una riña con un grupo de campesinos que terminó en tragedia ya que “El Indio” mató a un campesino en Coahuila.
Una pelea, dos disparos y la huida
Según reportes, los hechos ocurrieron durante una discusión con Javier Aldecoa Robles, un campesino presuntamente alcoholizado que, según testigos, portaba un arma y disparaba al aire. Emilio, en un aparente intento de defenderse, sacó una pistola y disparó al pecho de Aldecoa.
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El campesino murió horas después, y Fernández huyó del país con la ayuda de conocidos, escondiéndose en Guatemala. Fue capturado días después y extraditado a México, donde fue recluido en la cárcel municipal de Torreón.
Formal prisión y una industria dividida
El 10 de junio de 1976, un juez de Torreón decretó prisión formal para “El Indio” sin derecho a fianza, por el delito de homicidio. Aunque su defensa alegó legítima defensa, los indicios fueron suficientes para mantenerlo detenido.
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El medio artístico se dividió, mientras figuras como Luis de Alba, Ignacio López Tarso y José Bolaños le expresaron su apoyo moral, otros, como Roberto Gavaldón, se deslindaron totalmente del caso.
Sentencia, libertad y regreso al cine
Meses después, el 30 de noviembre de 1976, Fernández fue sentenciado a cuatro años y medio de prisión, pero al ser una pena menor a cinco años, pudo acceder a libertad bajo fianza. El 11 de diciembre salió de prisión tras pagar 150 mil pesos. Lloró al conocer la noticia y planeó su regreso inmediato al cine, aunque con medidas de seguridad, pues temía represalias de la familia del fallecido.
Fue así como “El Indio” Fernández mató a un campesino en Coahuila y ese acto, más allá de los tribunales, lo persiguió hasta su muerte en 1986. Aunque continuó trabajando en cine, la mancha de ese episodio nunca se borró del todo de su legado.