Carlos Bremer, reconocido por su incansable impulso al deporte, tomó una iniciativa impactante en 2019 al adquirir la casa Zhenli Ye Gon para ayudar a deportistas mexicanos.
Esta residencia, previamente confiscada por el Gobierno Federal en 2007 debido a conexiones con el narcotráfico, lavado de dinero y posesión de armas prohibidas, se convirtió en una herramienta para respaldar a los deportistas que participaron en los Juegos Panamericanos de Lima de 2019.
Ubicada en Lomas de Chapultepec, la casa fue subastada por el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) como parte de las medidas gubernamentales para recuperar recursos provenientes de bienes incautados.
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Carlos Bremer desembolsó un total de 102 millones de pesos por esta propiedad, comprometiéndose a destinarla a la concesión de becas a las familias de los deportistas.
Al respecto, Bremer afirmó: "Esa casa se usó para darle becas a las familias de los deportistas. El presidente tuvo la iniciativa de apoyarlos con un millón de pesos a cada familia, 956 familias, de donde yo nada más aporté lo de la casa, que era la décima parte".
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Aunque la residencia era de su propiedad, Bremer enfatizó que su intención no era lucrar con ella.
Hasta febrero de 2023, Carlos Bremer reveló que aún no había visitado la casa debido a la polémica generada en las redes sociales. Durante una ceremonia de premiación en la Bolsa Mexicana de Valores, expresó: "No la he ido ni a visitar, porque como hay mucha polémica en todas esas cosas, yo quería dejar en claro que lo hice (comprar la casa) para apoyar al deporte".
Así luce la lujosa mansión Zhenli Ye Gon que compró Carlos Bremer
La imponente casa de cuatro pisos, erigida en un terreno de mil 218 metros cuadrados, destaca no solo por su espléndida arquitectura francesa, sino también por su intrigante pasado.
Esta propiedad fue objeto de embargo por parte del gobierno, perteneciente al empresario chino-mexicano Zhenli Ye Gon, quien fue detenido en 2007 bajo acusaciones de suministrar pseudoefedrina a narcotraficantes en México.
Situada en el exclusivo barrio habitado por las familias más acaudaladas de Ciudad de México, la residencia reveló la sorprendente suma de dinero en efectivo durante la intervención: US$206 millones, siete millones de pesos y 235.000 euros.
El contundente golpe al crimen organizado en marzo de 2007 marcó el decomiso de efectivo más significativo en la historia de México.
Uno de los elementos más destacados es la majestuosa escalera, coronada por una imponente lámpara bajo un domo que ilumina la recepción de la mansión. En el segundo piso, cuatro recámaras principales son accesibles tanto por la escalera como por un elevador con generador eléctrico propio.
En la planta superior, un amplio salón con capacidad para 200 personas se erige como punto focal. Los refinados acabados de mármol impregnan casi toda la construcción, otorgándole un toque de distinción.
Con 14 baños en total, la propiedad también cuenta con una piscina dotada de un "domo para regular la temperatura", además de un salón de spa y un baño sauna, añadiendo un toque lujoso y completo a la residencia.