El standupero Ricardo O'Farrill denunció haber sido víctima de maltratos en el anexo al que fue llevado días atrás, cuando habría sufrido una crisis en que reveló secretos de sus compañeros comediantes.
Recientemente, el famoso cómico volvió a las redes sociales, en donde ha publicado actualizaciones de su estado de salud, de sus proyectos y también de lo que vivió en el anexo.
En un video explicó que va a proceder legalmente en contra de la clínica por el abuso al que fue sometido, aunque indicó que debe guardar algunas de sus vivencias para el juicio.
Te podría interesar
En la grabación comentaron que por una situación de consumo de marihuana, fue sometido y en contra de su voluntad fue llevado a una clínica de rehabilitación donde sufrió violencia.
El comediante reveló que algunos de sus familiares intentaron de convencer a su chófer Hugo para que vendiera sus camionetas y sus cuadros para pagar la clínica, porque no tenían acceso a sus cuentas bancarias.
Te podría interesar
"En la clínica yo estaba sufriendo de este maltrato que, en el transporte me convulsioné dos veces. Entonces, en el transporte pedí dos veces que paráramos por piedad y no paramos", expresó.
Narró que se solicitó que le aflojaran las amarras para dejarlo descansar, pero los empleados de la clínica no hicieron caso y se burlaron de él.
"Uno me chasqueaba en el oído, me cacheteaba como para provocarme y después me hacían cariñitos, como para provocarme de igual manera", contó en la grabación.
Ricardo O'Farrill acude a la clínica en que estuvo internado
Después de sus afirmaciones, el comediante se declaró en huelga de hambre hasta que la clínica Margaritas, en que fue internado para su rehabilitación, le permitiera ver a sus compañeros.
También publicó un video de su visita al sitio, en que no fue recibido, a pesar de que tocó la puerta en múltiples ocasiones, y posteriormente subió el tono de sus exigencias.
"Quiero saber cómo está Camila, cómo está Pau. Quiero saber cómo está el doctor Antonio. Quiero ver cómo están sus familias", dijo el popular cómico.
Además, gritó que sabía cómo estaban observando, pero no salían a recibirlo, por lo que escupió en la puerta y la pateó.
"En esta clínica maltratan a sus pacientes, sépanlo bien, sépanlo bien. Cofepris, CNDH... esta clínica tiene que cerrar, porque los tratan como si fuera peor que un anexo y cuesta casi 200 mil pesos", dijo.
Acusó que en su tratamiento, el personal del sitio le aplicó valium, un medicamento para tratar la ansiedad leve a moderada y la tensión, y para relajar los músculos.
El siguió con sus intentos para que el personal saliera y hablar con ellos, pero no sucedió.
"Vengan a esta locación y preguntemos por Camila, nada más. Si estuviera yo equivocado, ya hubieran mandado una patrulla porque oriné su puerta, y no he parado de escupir y no he parado de molestar su timbre", externó.
Reiteró que se viven maltratos al interior de la clínica, que se amarra a los pacientes en una especie de tortura, y añadió que ese tipo de lugares deben de cerrar.
Al paso de unos minutos, acudió al sitio una patrulla de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, y un agente recibió la denuncia del comediante, quien le comentó que sólo deseaba saber cómo estaban sus compañeros.
Pese a la presencia del oficial, y los reiterados intentos por llamar la atención del personal y que salieran, las puertas no fueron abiertas.
Un usuario de Twitter compartió el momento en que empleados de la clínica, ya afuera de las instalaciones, agreden al comediante.
En la grabación se observa cómo Ricardo es detenido por una de las personas presentes, mientras que el empleado le escupe.
El standupero lo reta a volverle a pegar, lo cual ocurre instantes después, a lo que el Ricardo O'Farrill le reclama los tratos que hay en el clínica y la manera en que viven los pacientes.