El cantante originario de Sinaloa, Chalino Sánchez nació un día como hoy, pero de 1960 dejando un legado en los corridos mexicanos tras su muerte el 16 de mayo de 1992 cuando fue asesinado con un arma de fuego y arrojado a un canal de agua, amarrado de sus tobillos y muñecas en Culiacán, Sinaloa.
Rosalino Sánchez Félix creció en una familia humilde con bajos recursos, durante su adolescencia viajó de forma ilegal a Estados Unidos, pero también existen los rumores de que huyó de México por haber asesinado a quien abusó sexualmente de una de sus hermanas.
Presuntamente Chalino había trabajado como “coyote”, es decir una persona e que ayudaba a pasar gente indocumentada en la frontera de Estados Unidos y México, junto a su hermano Armando quien fue asesinado en 1984 y encontrado en un hotel en Baja California.
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Se dice que después de la muerte de su hermano fue encarcelado, lo que marcaría un parteaguas en su vida, pues cuando fue encarcelado compuso varios corridos que lo llevarían al éxito de su carrera musical, pues fueron grabados en un estudio en San Ángel, ubicado en los Ángeles, California.
La nota de la muerte anunciada de Chalino Sánchez
“El Rey de los corridos” tuvo un concierto en Sinaloa en el que presuntamente recibió una nota en donde lo amenazaban de muerte, después de leerla continuó cantando y al finalizar el concierto se dirigió a celebrar con amigos, cuando en el trayecto su vehículo fue interceptado por un grupo armado.
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Los hombres se presentaron como policías y dijeron que su comandante quería hablar con él a solas, el intérprete de “Nieves de Enero” no quería poner en riesgo a sus acompañantes, por lo que aceptó ir solo.
Chalino Sánchez murió en su tierra natal a los 31 años, tenía dos hijos; Cynthia y Adán, este último falleció en un accidente automovilístico a los 19 años en 2004.