El productor de cine Harvey Weinstein llegó a primera hora de la mañana al tribunal del distrito de Manhattan, en Nueva York, en donde comparece para ser procesado por tres nuevos cargos por delitos sexuales.
Weinstein, que llegó esposado con los brazos a la espalda, se enfrenta así a un total de seis cargos por delitos graves relacionados con tres mujeres: dos cargos de agresión sexual depredadora, dos cargos de acto sexual criminal en primer grado y un cargo de violación en primer grado y otro de violación en tercer grado.
Los cargos están relacionados con incidentes separados en 2004, 2006 y 2013 y las imputaciones a las que se enfrenta hoy, de agresión sexual depredadora, violación y abusos, conllevarían la posibilidad de una sentencia máxima de cadena perpetua, según la Fiscalía de Manhattam.
Weinstein, de 66 años, fue acusado la semana pasada por un gran jurado de un cargo de cometer un acto sexual criminal en primer grado y dos cargos de agresión sexual depredadora.
Él ya se declaró inocente de dos cargos de violación y un cargo de delito sexual en primer grado, y estaba en libertad provisional tras pagar una fianza en efectivo de un millón de dólares.
La Fiscalía de Manhattan, que lleva meses investigando al otrora poderoso productor de Hollywood, ya le había imputado a finales de mayo tres cargos que abarcaban una violación y abusos contra dos mujeres, a las que se ha sumado ahora una tercera víctima.
Un gran jurado lo acusa de haber realizado un “acto criminal sexual en primer grado” al practicarle sexo oral forzado a una mujer en julio de 2006, según el pliego de la acusación actualizado.
También le suma dos cargos de “agresión sexual depredadora”, los más graves entre el total de seis que reúne hasta el momento y que están penados en EE.UU. con un mínimo de diez años de prisión y un máximo de cadena perpetua.
El abogado del productor, Ben Brafman, ya dijo que Weinstein se declarará “no culpable de los nuevos cargos” y que espera “reivindicar completamente” las alegaciones contra él, que considera “falsas”.
En los últimos nueve meses, decenas de mujeres han acusado a Weinstein de conductas sexuales inapropiadas y en algunos casos de violación, como las actrices Rose McGowan y Paz de la Huerta, pero él sostiene que sus relaciones fueron consentidas.
Las dos publicaciones que sacaron a la luz el supuesto historial de abuso de Weinstein ganaron el premio Putlitzer al servicio público y fomentaron los movimientos “Me Too” y “Time’s Up”, que luchan contra el acoso sexual en la industria del cine y fuera de ella.
Hasta la cita judicial de hoy, Weinstein ha permanecido en libertad bajo fianza, sin pasaporte y con un localizador en el tobillo.
Aunque la fiscalía de Nueva York ha sido la primera en reunir evidencias suficientes para acusarlo formalmente, Weinstein también está siendo investigado por las autoridades en Londres y Los Ángeles.