Con el fin de reforzar el significado de la Revolución Mexicana y dar las nuevas lecturas que artistas visuales han realizado en torno a la figura de Emiliano Zapata, el Museo de Arte Moderno presenta ocho piezas de su colección dedicadas al caudillo del sur.
La muestra “Zapata doble: de Chinameca a Chiapas” incluye obra de artistas como Ignacio Aguirre, David Alfaro Siqueiros, Fernando Leal, Arturo García Bustos, Gelsen Gas y Giorgio Viera, informó la Secretaría de Cultura federal en un comunicado.
La curadora de la muestra, Sofía Neri, apuntó que Zapata es uno de los personajes históricos que se ha convertido en un mito nacional en relación a los movimientos que tienen que ver con las luchas sociales.
“Abordamos la figura de Zapata so pretexto de la conmemoración de la Revolución Mexicana. Su importancia como icono dentro de la historia del arte mexicano es muy relevante, por lo que resulta interesante que la gente conozca por medio de nuestra colección cómo se ha ido transformando al paso de los años, y dentro de las distintas miradas de los artistas”, indicó.
Apuntó que la figura de Zapata no es protagónica en todas las obras, pues en algunas puede que sólo haya una reminiscencia o una inspiración. Casi todos los autores tienen que ver de una u otra manera con las luchas revolucionarias de distintos periodos o momentos de la historia.
La primera pieza que se puede apreciar de la exposición es un óleo colorido sin título de Fernando Leal, quien plasmó la tipología física de Zapata que por mucho tiempo fue reproducida. Le sigue el grabado “Zapata campesino”, de Ignacio Aguirre, en la que se observa a Emiliano Zapata en un primer plano, vestido con ropa de manta y atrás de él unas milpas.
De autor desconocido se exhibe la fotografía “Ranchero sosteniendo la cabeza de una mujer muerta” (1910) que captó un momento de la vida cotidiana de la era revolucionaria, mientras que de David Alfaro Siqueiros se exhibe “The partisan” (1958).
En su obra “Zapata”, Arturo García Bustos, simula que la iconografía del héroe revolucionario , “la pieza busca increpar al espectador y hacerlo reflexionar sobre la acción e inacción en la vida cotidiana.
También se exhiben fotografías contemporáneas, como la de Giorgio Viera, de 2003, que muestra la pobreza no superada en “Acteal, Chiapas”, y la de Francisco Mata Rosas, en la que se denuncia los asesinatos de guerrilleros, como la de Rancho Nuevo, Chiapas, en 1994.
De Gelsen Gas, se exhibe “Después de Chiapas” (1998), en la que congeló en versión pop al personaje en una colorida gráfica digital. “Aquí Grass experimentó con el arte digital y se ve un Zapata transfigurado por un lenguaje del arte pop”, comentó Sofía Neri.
La curadora del Museo de Arte Moderno, señala que con las ocho piezas se da un testimonio de la fluctuación del imaginario y de la construcción y pérdida de significados que sufre el estudio de la historia conforme transcurre el tiempo.
“Zapata doble: de Chinameca a Chiapas”, estará abierta al público hasta el 11 de febrero de 2018 en la Sala Gamboa del Museo de Arte Moderno, ubicado en Paseo de la Reforma y Gandhi. Con entrada libre los domingos.