El gobierno mexicano, a través de los diputados de Morena, ha lanzado una "bomba" de 26 aumentos a cargas fiscales y derechos ya existentes, con el objetivo de recaudar 271 mil millones de pesos adicionales en 2026. Estos nuevos cobros, que van desde el 5% hasta el 109%, afectarán directamente el consumo y el bolsillo de los ciudadanos, incluyendo productos cotidianos y servicios que antes eran más accesibles.
La cuchara grande de los impuestos
En un giro que ha generado preocupación entre los ciudadanos, el gobierno mexicano, a través de sus legisladores, ha optado por una estrategia fiscal que, si bien evita una reforma fiscal formal, impactará significativamente la economía familiar.
Eduardo Torreblanca, en MVS Noticias, ha desglosado esta situación, señalando que "se van a servir con la cuchara grande" en lo que respecta a nuevos cobros y aumentos en impuestos ya existentes. Esta medida, que busca inyectar 271 mil millones de pesos adicionales a la recaudación en 2026, se presenta como una necesidad ante la falta de una reforma fiscal que, según Torreblanca, no se quiere por su "costo político".
De videojuegos a zonas arqueológicas: La amplia red de nuevos cobros
La lista de productos y servicios afectados por estos aumentos es extensa y abarca desde artículos de consumo diario hasta actividades culturales y trámites administrativos. Entre los más destacados se encuentran:
- Cigarros puros y productos de nicotina: Un golpe directo a los fumadores.
- Videojuegos violentos: Una medida que podría generar debate sobre la definición de "violento" y su impacto en la industria del entretenimiento.
- Apuestas y sorteos: Actividades que verán incrementados sus costos
- Refrescos, incluidos los cero azúcares y dietéticos: Una sorpresa para muchos, ya que incluso las opciones consideradas "saludables" no se salvan de los nuevos gravámenes.
- Permisos de residencia y aeródromos: Afectando a quienes buscan establecerse en el país o utilizan servicios aéreos.
- Permisos de aeronavegabilidad y licencias de vuelo: Impactando a la industria de la aviación.
- Inspecciones financieras: Con un aumento significativo, como el de la licencia de revisión financiera que asciende a 31 millones de pesos.
- Salidas de niños mexicanos al extranjero: Un trámite que ahora tendrá un costo de 294 pesos, lo que antes era un proceso más sencillo.
- Visitas a zonas arqueológicas y museos: Un aumento que desincentivará el turismo cultural. Por ejemplo, Chichen Itzá costará 104 pesos más, y Palenque o el Museo de Antropología, 209 pesos más.
El Consumidor paga la factura: desincentivo y mercados negros
La estrategia fiscal adoptada por el gobierno, según Eduardo Torreblanca, con Manuel López San Martin, recae directamente en el consumidor. "La factura la vamos a pagar los consumidores, no quienes obtengan mayores recursos de su actividad económica, sino que el que consuma más va a tener que pagar más impuestos”.
Esta aproximación, que busca alcanzar un billón y medio de pesos como extra a la recaudación, coincide curiosamente con lo que paga como interés la deuda mexicana.
Las consecuencias de esta política son claras: "Esto desincentiva el consumo evidentemente y fomenta la ilegalidad, los mercados negros", advirtió Torreblanca. La facilidad de obtener recursos a través del consumo masivo, en lugar de una reforma fiscal integral, podría generar un efecto contraproducente en la economía y en la confianza de los ciudadanos.
Los nuevos impuestos y aumentos para 2026 marcan un precedente en la política fiscal del país. Si bien la necesidad de recursos es innegable, la forma en que se buscan obtenerlos genera interrogantes sobre el impacto a largo plazo en el consumo, la economía informal y la calidad de vida de los ciudadanos. La "cuchara grande" de los impuestos, como la describe Eduardo Torreblanca, parece estar lista para servirse, y el consumidor será quien pague la cuenta.
