El Servicio de Administración Tributaria (SAT) no es una entidad fácil de engañar, pues ya tiene sus leyes y reglas muy bien establecidas, sobre todo cuando hablamos de transferencias bancarias y el parámetro que dicta cuándo sí y cuándo no debemos pagar impuestos.
Bueno, para quienes no lo sepan, el pago de impuestos a los depósitos en efectivo se estableció desde el 2008, con base la Ley de Impuesto Sobre Depósitos en Efectivo (LIDE).
No todas las trasferencias están sujetas al pago de impuestos, sólo serán aquellas que excedan los 15 mil pesos, y eso engloba tanto personas físicas y morales respecto de todos los depósitos en efectivo, en moneda nacional o extranjera.
Te podría interesar
Teniendo claro lo anterior, ahora sí puedes saber un truco que hacen muchas personas para no pagar impuestos en este tipo de transacciones.
Te podría interesar
¿Es cierto que el concepto de transferencias puede evitar que me cobren impuestos?
Esta pregunta tiene dos respuestas tanto positiva como negativa. Las y los contribuyentes que hacen un tipo de transferencia bancaria suelen ponerlos bajo el concepto de “donativo”, pero este recurso no garantiza que el SAT no se dé cuenta de lo que planeas.
La Ley de Impuestos Sobre la Renta (ISR) establece que no se pagará el impuesto por los ingresos por donativos siempre y cuando:
- Se realicen entre cónyuges.
- Que sea de descendientes a ascendentes en línea recta, es decir, de padre a hijo (a). Siempre que los bienes recibidos no se enajenen o se donen por el ascendiente a otro descendiente en línea recta sin limitación.
- Siempre que el valor total de los recibidos en un año de calendario no exceda3 veces el salario mínimo.
El Impuesto Sobre Depósitos en Efectivo no aplica para la Federación, las entidades federativas y los municipios y las paraestatales que son consideradas como no contribuyentes ante el SAT, por lo que sus transferencias bancarias no le generarán impuestos.