La Unicef reveló a través de un estudio que en países como México, el 21% de los empaques de productos de alto contenido calórico y poco nutritivos tienen impreso un personaje y el 82% de las bebidas dirigidas a la infancia lo utiliza y con ello queda claro que madres, padres y gobierno no pueden contrarrestar el impacto del consumo en la salud de los menores, señaló Fiorella Espinosa, representante del organismo.
El próximo 1º de abril entrará en vigor en México la segunda etapa de implementación del nuevo etiquetado frontal de advertencia en alimentos y bebidas envasados que prohíbe contener en el empaque personajes, dibujos animados y promociones dirigidas a las niñas y niños, lo que ha sido festejado por especialistas.
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Durante el foro "El daño de la publicidad de ultraprocesados en niñas y niños", organizado por la Alianza por la Salud Alimentaria, la doctora Jennifer Harris, especialista de la Universidad de Connecticut en temas de publicidad y salud pública, destacó que de acuerdo a un estudio que analizó 880 campañas publicitarias, demostró que los anuncios más efectivos fueron los que apelaron a las emociones y que contienen poco o nulo contenido racional "dejando en claro que la publicidad no tiene la intención de informar a los consumidores, sino aprovecharse de ellos y engancharlos a través del contenido emocional, una estrategia muy efectiva en los niños".
Respecto al tema, la Oficial de Nutrición para Entornos Saludables de la Unicef en México, Fiorella Espinosa, apuntó que desde 2004 la Organización Mundial de la Salud (OMS), advirtió sobre la necesidad de regular la publicidad de alimentos ultraprocesados y bebidas dirigida a la infancia señalando que se aprovechaba de la credulidad e inexperiencia de los menores y más de 15 años después, la menores siguen bombardeados y engañados por este tipo de publicidad.
Ante la evidencia científica de la influencia de los personajes, imágenes y otros elementos que se utilizan dirigidos a los menores, las especialistas celebraron la entrada en vigor de la segunda etapa del etiquetado en alimentos y bebidas y coincidieron en hacer un llamado al gobierno para que fortalezca las acciones en la protección de la salud alimentaria de los menores.