Este martes 1 de julio entra en vigor el nuevo acuerdo de libre comercio de Norteamérica T-MEC, que renueva al viejo TLCAN firmado en 1994, en esta ocasión en medio de la crisis de Salud que provocó la pandemia del Coronavirus, que no solo ha dejado millones de muertos, desempleo y quiebre de empresas sino que derrumbó a la economía a niveles no vistos desde la Gran Depresión.
Las estimaciones para la economía mexicana van desde menos 8 por ciento hasta menos 10.5 por ciento para este año.
Para el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el T-MEC permitirá que la economía repunte, así lo dijo la secretaria de economía Graciela Márquez.
Aunque ya hay algunas voces que afirman que por si solo el T-MEC no dará crecimiento económico, pues el gobierno de AMLO debe dar mensajes de certidumbre para la inversión nacional y extranjera.
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En ese sentido el analista, Luis Rubio, puntualizo que las diferencias entre el TLCAN y el T-MEC, se muestran en la orientación que tendrán ahora los gobiernos para proteger las inversiones, aprovechó para reclamar que la actual administración no se ha caracterizado por proteger la inversión ni fomentar su desarrollo.
Un reto para los sectores productivos mexicanos son las nuevas cláusulas que exigieron EEUU y Canadá que tienen que ver con el respeto a la libertad sindical y con el trabajo infantil, ya que pueden provocar denuncias en los paneles de controversia que están signados en el nuevo pacto comercial.
En este sentido la secretaria del trabajo Luisa María Alcalde, exhortó a los empresarios a ser cuidadosos, conocer y cumplir la ley para evitar demandas en estos rubros, argumentando ignorancia o desconocimiento de las nuevas leyes.
Hay que destacar que en 2019 el flujo comercial entre los tres países, previó al Covid, se ubicaba alrededor del 30% del PIB mundial, es decir 1.2 billones de dólares.
Para la subsecretaria de comercio Luz María de la Mora, este acuerdo será prospero e incluyente y mantiene al sector exportador como un motor de la economía nacional.
Dijo que el TMEC le ha dado a los mexicanos acceso a productos y mercancías de calidad a precios competitivos.
Hay que decir que el T-MEC mantiene la mayoría de las medidas de libre comercio del TLCAN, además de los capítulos en materia laboral, también hay cambios notables para las reglas de origen de la industria automotriz, en particular que el 75% de la producción debe tener insumos norteamericanos. Asimismo, el 70% del acero y aluminio de un vehículo debe ser norteamericano.
El gobierno de EEUU, ha amenazado con que hará cumplir el acuerdo desde el día 1 en que entre en vigor.
Los empresarios mexicanos reconocen que no solo deben cumplir con el acuerdo, pues también deben aguantar el factor electoral que podría enrarecer el ambiente.