Petróleos Mexicanos (Pemex) informó este jueves que colocó exitosamente en los mercados internacionales de capital bonos por 7 mil 500 millones de dólares, en una operación que calificó como la más grande en la historia de la petrolera.
La transacción forma parte de un plan de pago anticipado y refinanciamiento de deuda anunciado por la petrolera en la víspera para reducir el saldo de su abultada deuda financiera de casi 105 mil millones de dólares y mejorar su perfil de pagos.
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La firma aseguró que los recursos obtenidos de la colocación serán destinados al refinanciamiento de sus pasivos, “sin representar crecimiento en los saldos de la deuda”.
Pemex detalló que recibió una demanda total de 38 mil millones de dólares, “la mayor para una emisión de la empresa” y que representa cinco veces el monto total emitido.
La operación se dividió en tres papeles: mil 250 millones de dólares con vencimiento a siete años, 3 mil 250 millones de dólares a 10 años y 3 mil millones de dólares a 30 años.
La guía de rendimientos para la deuda es de 6.50% para el tramo a siete años, 6.85% para el de 10 años y de 7.70% para el de 30 años.
“Esta transacción se posiciona como la más grande en la historia de la compañía y es una de las mejores recibidas por el mercado. Se contó con la participación de inversionistas de Estados Unidos, Europa, Asia, Sudamérica y Medio Oriente”, dijo Pemex en un comunicado.
Los agentes colocadores fueron J.P. Morgan, Goldman Sachs, HSBC, Citigroup, Crédit Agricole CIB, Mizuho Securities y BofA Merrill Lynch.
La deuda financiera a corto plazo de Pemex, cuyos niveles de producción de hidrocarburos están en mínimos en décadas, cerró en casi 14 mil 600 millones de dólares al 30 de junio, según sus estados financieros.
De acuerdo con datos de Eikon Refinitiv, Pemex tiene vencimientos de bonos entre 2020 y 2023 por casi 30 mil millones de dólares. El tamaño de sus pasivos la han puesto bajo la lupa de calificadoras de riesgo, que podrían bajar aún más su nota crediticia.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha dicho que hará todo lo necesario para sanear financieramente a la empresa más grande del país, la cual, asegura, le fue entregada en ruinas por su predecesor, quien elevó la deuda financiera desde unos 60 mil millones de dólares a más de 100 mil millones.
El gobierno ha dicho también que prevé llevar la producción de crudo desde los actuales 1.7 millones de barriles por día (bpd) a 1.9 millones de bpd a fines del 2020, una meta que expertos ven difícil de alcanzar.
Para el 2020 la administración de López Obrador planea dar “apoyos” a Pemex por el equivalente de 4 mil 400 millones de dólares, de los cuales 2 mil 350 millones son de capital y el resto reducción de impuestos. Además, estima dotarla de un presupuesto de 26 mil 500 millones de dólares, cerca del 9% más que en 2019.
Este año la empresa ha recibido entre rebajas fiscales, capital y manejo de pasivos laborales unos 9 mil 500 millones de dólares.