El presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, ratificó este lunes que someterá a consulta popular el destino del millonario proyecto de un nuevo aeropuerto para Ciudad de México, un tema que ha provocado una polémica con el empresariado.
“Se va a someter a una consulta para que el pueblo, el soberano, sea el que decida sobre este asunto y sobre todos los asuntos que tengan que ver con el interés público”, dijo López Obrador en conferencia de prensa.
La nueva terminal en el oriente de la capital, diseñada entre otros por el célebre arquitecto británico Norman Foster y valuada en unos 13.000 millones de dólares, ha sido criticada por López Obrador como una obra “faraónica” y plagada de corrupción, por lo que prometió cancelarla durante su campaña electoral.
Tras una inusual conferencia de prensa en abril, donde Slim dijo que “suspender el proyecto es suspender el crecimiento del país“, el futuro mandatario moderó su postura y dijo que consideraría alternativas.
La semana pasada, López Obrador adelantó que sometería a la opinión de asociaciones de ingenieros mexicanos un informe de viabilidad elaborado por su equipo para definir si continuaba con el proyecto, lo entregaba en concesión a privados o lo cancelaba y optaba por ampliar la capacidad de la envejecida terminal actual usando un antiguo aeropuerto militar.
López Obrador dijo este lunes que se harán más consultas técnicas y posteriormente se iniciará un análisis de las propuestas y alternativas con “todas las voces y todas las opiniones”, para dejarlo finalmente a una votación popular de carácter vinculante.
“El método puede ser uno u otro, puede ser encuesta y el otro método puede ser el instalar mesas para recoger la opinión de los ciudadanos, pero sí vinculatoria (sic), es decir lo que resulte de la consulta es lo que va a llevar a cabo”, agregó.
El mandatario electo también dio detalles sobre la construcción de un tren en la península de Yucatán (sureste), que unirá importantes destinos turísticos en la zona del Caribe mexicano, con una longitud de 1.500 kilómetros y una inversión entre 120.000 y 150.000 millones de pesos (unos 7.840 millones de dólares).
Informó que el proyecto se realizará en asociación con inversionistas privados y que su equipo trabajará para completar el proyecto y las bases para lanzar una licitación a partir del 1 de diciembre, fecha en que asumirá la presidencia, y terminar la obra “a más tardar en cuatro años”.