El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) se pronunció a favor de la implementación de una nueva Reforma Fiscal con base en tres políticas dirigidas a la promoción e impulso de las inversiones nacional y extranjera.
Al presentar los resultados de la Encuesta de Perspectivas Económicas IMEF 2018-2019, correspondiente al mes de julio, Fernando López Macari, presidente nacional del IMEF, explicó que a pesar de que la reforma de 2014 fue exitosa en materia recaudatoria y en hacer que el país dependiera menos de los ingresos petroleros, actualmente hay poco espacio para maniobrar en las finanzas públicas para pensar en propuestas como la generalización del IVA.
Incluso, detalló que, en reuniones previas a las elecciones con los equipos de trabajo de los candidatos, les manifestaron que el tiempo político para sugerir la generalización de dicho impuesto ya había pasado.
Por tal motivo, dijo que las políticas fiscales que proponen son acelerar la deducción de las inversiones, permitir la deducción completa sobre las prestaciones de seguridad social, e incentivar la reinversión de las utilidades de las empresas mediante una tasa preferencial.
“Lo que en el IMEF hemos estudiado es que si esta, vamos a decir, estimulación de la inversión a través de estas políticas fiscales rindiera frutos, podría tener impacto en el crecimiento económico de nuestro país y podría tener impacto por ende en una mayor recaudación que se dé con una mayor inversión tanto doméstica como extranjera”, precisó.
En otro tema, Federico Rubli, vicepresidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del IMEF, cuestionó algunos de los 50 puntos del plan anticorrupción y de austeridad del presidente electo Andrés Manuel López Obrador.
Señaló que el retiro de las pensiones a los ex presidentes de México, así como la reducción de su salario no generarán ahorros significativos para la nación.
En este tenor agregó que lo que sí representaría un ahorro de entre 200 y 300 mil millones de pesos es la desaparición del Ramo 23, instrumento que ha permitido el gasto de recursos de manera discrecional.
“Cortar su salario a la mitad tampoco es un ahorro espectacular y así puede haber muchas no, la verdad es que por eso el IMEF, en la agenda, insistimos en un punto que no está en los 50 puntos pero que ojalá y le hagan caso porque ese sí generaría ahorros que es la cancelación definitiva del famoso ramo discrecional, el Ramo 23. Ahí pudieran ser entre 200 y 300 mil millones de pesos de ahorro”, expuso.