El fin de Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) implicaría que Estados Unidos pague un arancel de hasta 15 por ciento a las importaciones agroalimentarias de México, aseguró el exsubsecretario de Comercio Exterior, Francisco de Rosenzweig.
El actual socio de la firma internacional White & Chase expuso que el resultado es porque importaciones del mercado estadounidense se elevarían hasta tres veces más al arancel de 5.0 por ciento promedio que habría en caso de tener un posible escenario negativo.
Al participar en el panel “Los tratados comerciales y la agricultura”, como parte de las actividades del Foro EF Agro, enfatizó que con esta situación se tendría una severa afectación al consumidor final y, en consecuencia, habría una volatilidad en los mercados.
“Yo no me imagino una negociación con un tratado de menores (mecanismos) en términos de ambición, protección y facilitación de comercio, al que tenemos hoy. Es mejor no tener un acuerdo”, argumentó
Para Mariano Ruiz Funes, socio fundador de Structura, las negociaciones de tratados implican cambios en las reglas para el intercambio comercial y, al meterle trabas, trae incertidumbre y riesgos para los países, sectores involucrados, productores y, sobre todo, al consumidor final.
La situación entre México y Estados Unidos resultaría complicada, toda vez que ambos mercados son complementarios en exportación de frutas hortalizas y cárnicos, por ejemplo, e importaciones de granos.
De Rosenzweig remarcó que uno de los temas álgidos en el proceso de modernización del TLCAN, cuya séptima ronda concluyó este lunes, es la estacionalidad propuesta por el gobierno de Estados Unidos.
Ante procedimientos de dumping y subsidios, detalló que ésta busca limitar las exportaciones mexicanas de más de 60 productos agropecuarios altamente competitivos, las cuales asciende a más de 12 mil millones de dólares.
México debe evitar cualquier tipo negociación que conlleva barreras al comercio y, de lo contrario, sea un multiplicador y beneficie a los productores, principalmente, consideró.
En este tema habrá avances en la medida que Estados Unidos sea flexible en las mesas de trabajo para modernizar el acuerdo trilateral, de ahí que el mayor reto es el componente político que impide llegar a coincidencias, resaltó.
El presidente de Comercio Exterior del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), Mario Andrade, añadió que México seguirá apelando por el libre comercio, pues la propuesta proteccionista va en contra de los acuerdos del sector y es violatoria a las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC).