El secretario de Hacienda, José Antonio González Anaya, consideró que “no hay varitas mágicas” en materia de reformas, por lo cual se tiene que seguir trabajando en ese rubro y en la implementación de las ya aprobadas.
Durante el Foro OCDE México 2018 “Un futuro con crecimiento e inclusión”, afirmó que ya se empiezan a ver los resultados del paquete de reformas estructurales aprobadas al inicio de la administración del presidente Peña Nieto, lo cual es reconocido por dicho organismo internacional.
Acompañado por el secretario general de la OCDE, José Ángel Gurría Treviño, y el secretario de Salud, José Narro Robles, el encargado de las finanzas públicas del país dijo que es importante reconocer los avances, al mismo tiempo que se reconocen los retos.
“A veces a la hora de hablar y de discutir para construir nos concentramos en lo que hace falta, pero es importante hacer un buen balance y un buen reconocimiento de los resultados que ya se tienen, para reiterar, como dice la OCDE en voz del doctor Gurría, para seguir reformando”, añadió.
En la presentación del reporte de la OCDE “Getting it Right” (Haciendo lo correcto), en el cual el organismo internacional recomienda a México una segunda ola de reformas, sostuvo que se está avanzando en el camino de las reformas y hay diferencias enormes respecto al país que era hace 20 o 30 años.
Comparó que hace 25 años, México exportaba 40 mil millones de dólares, y hoy México exporta 400 mil millones de dólares, es decir, 20 veces más, y se ha convertido en uno de los productores de coches más importantes, con una naciente y creciente industria aeroespacial.
Señaló que en foros como este, en el que se hacen propuestas sobre los cambios que necesitan los países, “nos damos cuenta de que no hay varitas mágicas (…) no hay una última reforma en ninguna de las áreas, hay que seguir trabajando como ya se comentó, hay que continuar con la implementación”.
González Anaya refirió que en su reporte, la OCDE dice: “México necesita redoblar esfuerzos para seguir mejorando sus políticas para promover un crecimiento más resiliente, más incluyente, y más sustentable. Por ello es muy importante que el próximo gobierno de México parta de la base de las reformas implantadas, las ajuste, las mejore y las complemente”.
Por su parte, el secretario de Salud coincidió que es necesario e indispensable hacer una evaluación rigurosa de las reformas para buscar fortalecer la economía, porque el crecimiento económico es condición necesaria para mejorar los niveles de vida del pueblo mexicano.
“Todo en la vida es perfectible y las reformas estructurales también, pueden mejorarse, pero constituyen en su conjunto un avance impórtate, son un buen camino para seguir avanzando”, añadió Narro Robles.
No obstante, precisó, “no hay nada peor que desechar esfuerzos colectivos por protagonismos de cualquier naturaleza”, ya que el país requiere continuidad en sus proyectos, pues no es fácil modificar la inercia de un país con la complejidad de México.
“Con problemas históricos como el de la desigualdad, pobreza o la falta de apego al estado de derecho, cierto es que muchos de nuestros problemas vienen desde nuestro origen, pero otros más vienen de nuestra limitación para pensar en grande”, añadió.
Subrayó que no puede faltar la búsqueda del consenso, “debemos abandonar posiciones de todo o nada, por eso debemos reivindicar a la política como el arte de negociar, tenemos que ceder en algunos puntos para ganar en lo más importante, tenemos que dejar algunos intereses personales para ganar en lo colectivo”.
Los retos de la nación exigen establecer los acuerdos políticos para construir una agenda de políticas públicas con visión de Estado de largo plazo y altura de miras, y se tiene que dar continuidad al esfuerzo realizado, estimó el funcionario federal
“No se trata de reinventar políticas para imprimir sellos propios, no se trata de desconocer lo avanzado ni los esfuerzos de quienes nos precedieron”, acotó el secretario de Salud.
Por ello, dijo, hay que reconocer que las reformas estructurales impulsadas por Enrique Peña Nieto, como lo avalaron en su momento las principales fuerzas políticas del país, son las que la Nación requiere, son adecuadas y necesarias para destrabar muchos de los lastres que frenan el desarrollo nacional.
“No debemos renunciar a la política para reformular las políticas, debemos reafirmar nuestra fe en la democracia en la cual no existe la unanimidad, su naturaleza es la naturalidad de posiciones conviviendo de tal forma que se asegure la gobernabilidad”, añadió.