El Fideicomiso de Inversión de Bienes Raíces Monterrey (Fibra Mty) descartó riesgo o vulnerabilidad para este instrumento financiero, a pesar del contexto de volatilidad económica derivada de las renegociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y del proceso electoral.
“Cuando vienen épocas de volatilidad, como la actual, en Fibra Mty nos preparamos con un balance sólido, rentas de largo plazo para librar la incertidumbre en el corto plazo y además hoy tenemos capacidad para adquirir nuevos edificios por si la coyuntura ofrece precios interesantes”, expuso el CFO del fideicomiso, Jaime Martínez.
Explicó en conferencia de prensa que más que preocuparse por esos dos factores y su incidencia en el mercado inmobiliario industrial, al que está dirigido la Fibra Mty, se ocupa en buscar inversionistas, independientemente de la época que se trate.
Respecto a su portafolio, el COO de la Fibra Mty, Javier Llaca, aseguró a su vez: “No sentimos, entre los usuarios, un riesgo de corto o mediano plazos por el TLCAN y las elecciones”.
Destacó que 16 por ciento de sus ingresos proviene del sector automotriz y al igual que otros inquilinos, como los de tecnología, continúan activos con programas de crecimiento ambiciosos “que no se ven amenazados por el desenlace del TLCAN”.
En otro orden de ideas, el CEO de Fibra Mty, Jorge Ávalos, dio a conocer conocer que en este 2018 el fideicomiso se encuentra en proceso de cierre de operaciones independientes aprobadas por su Comité Técnico y con intención de concretarse antes de finalizar el primer semestre del año.
La primera adquisición en proceso es “Patria”, un edificio de oficinas de aproximadamente ocho mil 50 metros cuadrados con nueve niveles de oficinas en el área metropolitana de la ciudad de Guadalajara, Jalisco.
La segunda operación corresponde al proyecto Zinc, una nave industrial construida a la medida del arrendatario, la aluminiera Cuprum, que actualmente ya es inquilino de la Fibra Mty, pero que será reubicado.
El inmueble estará localizado en el municipio de Santa Clara, en el estado de Nuevo León en una superficie de 41 mil 345 metros cuadrados. La construcción de la nave tendrá un periodo estimado de nueve meses.
De materializarse ambas transacciones, la Fibra habrá destinado cerca de 75 por ciento de los recursos provenientes de la oferta pública y colocación de certificados bursátiles fiduciarios inmobiliarios que llevó a cabo entre los meses de agosto y septiembre del año pasado.