El 62% de los argentinos desaprueba los resultados de los casi tres años de gestión del presidente Mauricio Macri, quien enfrenta el peor momento de su popularidad debido a la crisis económica, reveló una encuesta.
El sondeo publicado por la privada Universidad de San Andrés (UDESA) confirmó el balance negativo que hay sobre el gobierno, el cual no ha sido capitalizado por la oposición que no logra subir lo suficiente en la intención de voto.
Así, a un año de los comicios generales en los que Macri buscará la reelección, sólo un 22% de la población está satisfecha con el rumbo económico, político y social que hay en el país.
En términos generales, sólo el 25% reconoció que aprueba “algo” y 11 que aprueba “mucho”, lo que suma un 36%, cifra que contrasta con el 53% de valoración positiva que tenía el gobierno hace apenas un año, justo cuando ganó las elecciones legislativas.
Ahora, por el contrario, el 42% desaprueba “algo” y el 20% desaprueba “mucho” los resultados de la gestión macrista que comenzó a gobernar en diciembre de 2015.
De acuerdo con la encuesta, las simpatías y antipatías hacia el gobierno no varían por género pero sí por edad, ya que el apoyo a Macri crece entre la población mayor a 45 años y la de mayor poder adquisitivo, lo que se evidencia, además, cuando se realizan marchas en favor de su gestión.
El balance negativo se explica por la crisis económica que sumió a los argentinos en una recesión de por lo menos el 2.5% para este año, a pesar de que el gobierno había asegurado que durante 2018 la economía del país crecería un 3.5 por ciento.
Como parte de la crisis se suman la devaluación del 120% registrada este año por el peso, el incremento de la inflación del 15 al 45%, el endeudamiento récord y el aumento persistente de la pobreza y el desempleo.
A pesar de que el gobierno carece de resultados positivos, la encuesta demuestra que ningún político de oposición está aumentando de manera significativa su caudal de votos con miras a las elecciones del próximo año.
El escenario es incierto porque el 41% de los argentinos cree que en el crucial año electoral la situación económica empeorará, mientras que sólo un 32% cree que mejorará.