La industria mexicana de juguetes cerró 2017 con ventas por cerca de dos mil 800 millones de dólares, cantidad que representa 6.0 por ciento más que al cierre del año anterior, estimó Miguel Ángel Martín González, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria del Juguete (Amiju).
Indicó que “es un año histórico para el sector”, donde México también exportará por primera vez dos mil millones de dólares a Estados Unidos, Canadá, Europa y Centroamérica.
“Eso nunca había sucedido en nuestro país”, resaltó el dirigente en entrevista con Notimex, quien argumentó además que las ventas hacia el exterior son una oportunidad para abrir nuevos mercados hacia el futuro.
Subrayó que representantes de la industria acuden a las ferias internacionales del juguete en Hong Kong, China, Alemania y Nueva York, a fin de tener mayor presencia a nivel global. “De esos cuatro países sales al mundo porque asisten muchos compradores”, remarcó.
Sólo dos terceras partes del total del mercado interno, es decir 64 por ciento, corresponden a las ventas generadas desde el 10 de diciembre de 2017 y hasta el 9 de enero de 2018, cuando son celebradas las fiestas decembrina y Día de Reyes Magos, detalló.
Aunque la pelota es el juguete más vendido, al ser el más antiguo, los artículos de mayor demanda son los de perfil tecnológico –robots, celulares, tabletas electrónicas, consolas de videojuegos, drones- ganan terreno cada vez más y “son el nuevo bebé de la industria del juguete”, comentó.
Señaló que de manera paulatina se han consolidado los electrónicos porque crecen a tasas del 11 y 12 por ciento respecto al juguete tradicional, el cual avanza al ritmo de entre 4.0 y 4.5 por ciento.
Durante la visita de Melchor, Gaspar y Baltazar, acotó, los juguetes más solicitados por los niños, de entre cero y tres años de edad, son peluches, sonajas y musicales con luces y colores.
Los pequeños que están en la segunda infancia, de tres a siete años de edad, prefieren las princesas y los superhéroes que son los protagonistas de las películas, mencionó Martín González.
Mientras que los de mayor edad piden en sus cartas juegos muy sofisticados, como electrónicos, juegos de mesa, interactivos y de ensamble.
Los puntos de venta a los que acuden los Reyes Magos son las romerías, los mercados y las jugueterías, así como a las tiendas de autoservicios y departamentales, estos últimos con visitas cada vez mayores, sostuvo.
El presidente Amiju recomendó verificar que los artículos cumplan con los requisitos de información comercial y seguridad establecidos por las Normas Oficiales Mexicanas, lo cual garantiza la seguridad del producto, y supervisar que el juguete sea de acuerdo a la edad del niño.
Y para después de la mañana del 6 de enero, cuando las envolturas se han retiradas de los obsequios, pidió a los padres buscar el espacio y el tiempo para compartir con su hijo el valor del juego, finalizó.