Al cierre de la semana que recién concluyó, todas las divisas entre los principales cruces finalizaron con ganancias frente al dólar estadunidense, destacó Banco Base.
La entidad financiera detalló que el peso finalizó con una apreciación semanal de 2.77 por ciento o 50 centavos, al cotizar en alrededor de 17.59 pesos por dólar, y colocarse en el mercado cambiario como la tercera divisa más apreciada frente al dólar.
Señaló que, con ello, el índice ponderado del dólar elaborado por Bloomberg registró un retroceso semanal de 1.33 por ciento, al tocar su nivel más bajo desde septiembre del año pasado.
El tipo de cambio tocó un nuevo mínimo en el año de 17.5306 pesos por dólar, y desde el máximo histórico de 22.0385 pesos por dólar alcanzado en enero, hasta el mínimo del viernes, el peso muestra una apreciación de 20.2 por ciento o cuatro pesos con 44 centavos.
Detalló que en el año, la moneda mexicana muestra una apreciación de 14.05 por ciento o dos pesos con 91 centavos. Durante la semana, la apreciación del peso se respaldó en que el dólar perdió terreno de forma sostenida durante las cinco sesiones de la semana.
Al inicio, dijo, la depreciación del dólar se debió a que Donald Trump Jr., hijo mayor del mandatario estadunidense, dio a conocer correos electrónicos en los que reconoció que se reunió con una abogada rusa, bajo la promesa de obtener información proveniente de Moscú que afectaría la candidatura de Hillary Clinton.
En tanto, el deterioro de la credibilidad de la actual administración presidencial de Estados Unidos ha restado fuerza al dólar desde la primera mitad del año, por lo que el dólar siguió depreciándose las sesiones del miércoles y jueves ante comentarios de la presidenta de la Reserva Federal, Janet Yellen, frente al Congreso.
Ello, al señalar que es necesario mantener la cautela debido a la incertidumbre sobre el desempeño futuro de la inflación.
En ese sentido, la divisa norteamericana cayó con fuerza en la sesión del viernes con la publicación de la inflación de junio, dato que se ubicó en una tasa interanual de 1.6 por ciento, por debajo de las expectativas del mercado.
Asimismo se publicaron las ventas minoristas de junio que retrocedieron a una tasa mensual de 0.2 por ciento, señal de que el consumo se ha desacelerado durante el segundo trimestre.
Por otro lado, casi al cierre de la semana, el gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens, señaló que es prematuro considerar un recorte a la tasa de referencia durante los primeros seis a nueve meses de 2018.
En tanto, la expectativa de que el banco central mantenga una tasa de interés de referencia cerca de los niveles actuales durante la mayor parte de 2018, también contribuye con una entrada de capitales.
Desde diciembre de 2015, el Banco de México ha subido su tasa de referencia en 400 puntos base a 7.0 por ciento, con lo que el diferencial entre la tasa de interés interbancaria a 28 días y la libor a un mes se amplió desde 310 puntos base hasta 613 puntos base, el nivel más alto desde abril de 2009.
Las mayores tasas de interés en México resultan más atractivas para los inversionistas del exterior, lo que eleva el potencial de apreciaciones para el peso frente al dólar.
Por ahora se espera que el peso respete el soporte de 17.50 pesos por dólar, aunque no se descarta la posibilidad de que la paridad alcance nuevos mínimos durante las próximas tres sesiones, debido a las entradas de capitales relacionadas al programa de repatriación impulsado por la Secretaría de Hacienda, que tiene como fecha límite el 19 de octubre.