Altán Redes, consorcio internacional que desarrollará la Red Compartida, completó la financiación de dos mil 300 millones de dólares para dicho proyecto, el cual avanza a buen ritmo.
Recordó, además que 765 millones de dólares, 33 por ciento de la financiación total, son proporcionados en forma de capital garantizado por inversionistas privados mexicanos e internacionales, instituciones multilaterales, inversores institucionales y socios industriales locales.
En tanto, los suministradores tecnológicos, Huawei y Nokia, aportarán préstamos con un valor de 850 millones de dólares, equivalente a 37 por ciento del total, con madurez a 10 años, mismos que serán sustituidos progresivamente con crédito de la banca comercial.
De igual manera, mencionó que la banca mexicana de desarrollo aporta a través de Banobras, Nafin y Bancomext, 13 mil millones de pesos en créditos, con madurez a 14 años, los cuales son equivalentes a 690 millones de dólares o el 30 por ciento de la financiación total.
Adicionalmente, la banca mexicana de desarrollo pone a disposición de Altán Redes hasta cuatro mil 750 millones de pesos en línea de liquidez, de acuerdo con un comunicado del grupo.
La Red Compartida permitirá el acceso a la tecnología 4G-LTE más avanzada a al menos 92.2 por ciento de la población mexicana, la cobertura actual en esa tecnología apenas llega a la mitad de esa cifra, además proporcionará servicios en las zonas en las que los operadores actuales no llegan.
Este proyecto se realiza por medio de una Asociación Público-Privada, con la cual se espera generar una inversión de más de siete mil millones de dólares durante todo el periodo de concesión.
Altán Redes ganó la licitación en noviembre de 2016; es responsable del diseño, instalación, operación y mantenimiento de esta infraestructura de banda ancha mayorista.
La Red Compartida empezará a ofertar sus servicios al 30 por ciento de la población de México, a más tardar el 31 de marzo de 2018; lo ampliará a 85 por ciento de la población para finales de 2021 y completará el proyecto antes de enero de 2024, cuando 92.2 por ciento de la población tenga acceso a la red de banda ancha más moderna y eficiente en el mercado mexicano y a nivel internacional.