El entrenador de los Rayados de Monterrey, “Tano” Ortiz, ofreció una conferencia de prensa en el Aeropuerto Internacional de Monterrey, pero eludió abordar temas sensibles como su posible salida del club y la reacción de los aficionados tras la eliminación en la Leagues Cup.
Ortiz, visiblemente presionado, se mantuvo firme en su posición, alineándose con las declaraciones del presidente del club, y evitando ofrecer detalles adicionales.
A pesar de las insistentes preguntas de los periodistas, el entrenador se mostró evasivo y se limitó a asegurar que cuenta con el total apoyo de los jugadores, minimizando así la preocupación por el estado interno del equipo.
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Respecto a la eliminación en la Leagues Cup, Ortiz expresó su desilusión sin atribuir la situación a un fracaso rotundo. Enfatizó que, aunque el objetivo era avanzar, el equipo sigue comprometido con el esfuerzo y la mejora continua.
A pesar de las críticas y el descontento de la afición, el técnico reiteró que su enfoque permanece en trabajar y corregir el rumbo del equipo, sin hacer comentarios directos sobre las demandas de los seguidores para su salida.
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Sobre la presión que enfrenta en su cargo, Ortiz no negó que es significativa, pero destacó que está acostumbrado a las exigencias de dirigir una institución de la magnitud de Monterrey.
Se mostró firme en su rol, indicando que su intención es seguir adelante y resolver los desafíos actuales, sin ofrecer detalles sobre posibles reuniones con la directiva.
La situación en Monterrey sigue siendo tensa y el futuro del técnico continúa siendo un tema de especulación, mientras él se concentra en enfrentar los próximos desafíos que se le presenten.