Los Juegos Olímpicos de París 2024 serán un evento lleno de sucesos sin precedentes que serán recordados por mucho tiempo. Por ello, hoy te platicamos uno de ellos: Bob Beamon, el salto que hizo historia en México 1968.
Bob Beamon es una de las leyendas que han marcado la historia olímpica. El atleta estadounidense estableció un récord en salto de longitud en la Olimpiada de México 1968 con una marca de 8.90 metros.
Un oro de récord mundial
Bob Beamon nació el 24 de agosto de 1946 en el barrio de South Jamaica en Nueva York. Tuvo una infancia difícil al no conocer a su padre y perdió a su madre a una edad temprana, mientras que en su juventud se unió a una pandilla y tuvo problemas con la ley, sin embargo el deporte lo ayudó a reformarse. Fue descubierto por Larry Ellis, un reconocido entrenador, quien lo guió y apoyó para destacar como atleta.
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Beamon se convirtió en uno de los mejores atletas de Estados Unidos en la preparatoria, estableciendo un récord nacional en triple salto y quedando segundo en salto de longitud. En la Universidad de Carolina del Norte se dedicó al básquetbol y obtuvo una beca en la Universidad de Texas, pero fue seleccionado por los Phoenix Suns en el Draft de la NBA; cabe destacar que nunca llegó a debutar en la liga.
En los Juegos Olímpicos de México 1968, Bob Beamon con 22 años se enfrentó a su prueba más importante en el Estadio Olímpico Universitario. A pesar de su altura, poco peso y musculatura, estuvo a punto de ser eliminado en la etapa de clasificación con dos saltos nulos.
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Aunque realizó un salto desde casi un metro de distancia de la tabla, alcanzando los 8.19 metros, para asegurar su pase a la final. El récord mundial en aquel entonces era de 8.35 metros, establecido por el estadounidense Ralph Boston, quien también lo entrenaba de manera no oficial.
El 18 de octubre de 1968 Beamon dio 19 pasos antes de su primer salto y, en solo 6 segundos, estableció una nueva marca mundial de 8.90 metros. La sorpresa fue tal que los jueces tuvieron que medir la distancia a mano, pues no tenían los materiales para un salto tan largo.
Bob Beamon nunca volvió a competir en otra justa y solo colaboró con el Comité Organizador de Los Ángeles 1984. Sin embargo, historias como esta inspiran a los atletas para hacer historia, como seguramente lo harán en los Juegos Olímpicos de París 2024.
Con información de Raymundo Rangel.