El Sevilla fulminó por 3-0 al Real Madrid, muy perdido y con muy poca intensidad para sacar algo de un feudo como el Sánchez Pizjuán, con una primorosa primera mitad en la que dio un baño de realidad a un equipo madridista que dejó pasar la opción de situarse líder tras perder el Barcelona.
Los sevillistas, con un gran partido en el que superaron en tensión, garra y juego a un Madrid apagado y sin control ni pegada, cimentaron un triunfo que le aúpa a la zona alta en un primer tiempo de mucha calidad, en el que golearon con un doblete de André Silva y un tanto de Ben Yedder, tras lo que a los madridistas ya les fue muy difícil reponerse pese a intentarlo en la segunda mitad.