La FIFA expresó este martes su “gran alegría” por el rescate con vida de los doce niños futbolistas y su joven entrenador, que estaban atrapados en una cueva inundada en Tailandia.
En plena recta final del Mundial de Rusia, la Federación Internacional de Fútbol expresó su “profunda gratitud a todas las personas implicadas en las operaciones de salvamento, que desgraciadamente costaron la vida a uno de los buzos, mandamos un recuerdo a su familia”.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, había invitado a los niños a asistir a la final del Mundial-2018, el domingo en Moscú, pero los jóvenes futbolistas no podrán estar presentes.
“No pueden ir, deben quedarse en el hospital un tiempo”, anunció Thongchai Lertwilairatanapong, alto responsable del Ministerio de Salud de Tailandia.