El Barcelona consiguió un valioso empate 1-1 en el campo del Chelsea, este martes en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones, en un partido donde el traje de superhéroe se lo volvió a vestir Lionel Messi.
El astro argentino, que nunca antes había marcado contra el equipo londinense, consiguió el tanto del empate en el minuto 75, cuando el choque se le complicaba al Barça por el gol del brasileño Willian para el Chelsea en el 62.
El empate es un buen resultado para el equipo catalán, que intentará dar el golpe definitivo en la vuelta del 14 de marzo ante su público. Esta vez no llegará a la vuelta de los octavos en una situación tan dramática como el año pasado, cuando tras perder 4-0 en la ida ante el París Saint-Germain tuvo que protagonizar una épica remontada (6-1) en el Camp Nou para eliminar a los franceses.
El Barcelona sigue con buenas sensaciones en su reto de buscar el ‘triplete’ de final de temporada: en la Liga española es líder con 7 puntos de ventaja sobre el segundo, el Atlético de Madrid, y en la Copa del Rey se medirá en la final al Sevilla en abril. Por eso continuar adelante en Champions se presenta como el principal desafío para el equipo de Ernesto Valverde, que se ha fijado como reto destronar en el torneo europeo a su enemigo histórico, el Real Madrid.
“En la vuelta, los dos intentaremos imponer nuestros estilos de juego y ellos tienen recursos para ponernos en problemas. Esto todavía no es definitivo”, estimó Valverde tras el partido.
El Chelsea, que tiene casi imposible revalidar su corona en la Premier League -es cuarto a 19 puntos del líder, el Manchester City-, confía en la Liga de Campeones para poder brillar este curso. Por el momento tendrá la difícil tarea de viajar a Barcelona con un resultado muy incómodo y con la obligación de marcar.