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Polvo del Sahara sigue afectando calidad del aire en Monterrey

Las inversiones que se realizan en Nuevo León se traducen en obas
Las inversiones que se realizan en Nuevo León se traducen en obasCréditos: Freepik/Unsplash
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El llamado “polvo del Sahara”, que ingresó ayer a la entidad, sigue causando estragos en la calidad del aire en el área metropolitana de Monterrey este jueves.

En un comunicado de prensa, la Secretaria de Medio Ambiente, a través del Sistema Integral de Monitoreo Ambiental, informó que se continuará el monitoreo de este fenómeno natural que llegó el miércoles 31 de julio y se mantendrá hasta el viernes 2 de agosto.  

El material particulado proveniente del Sahara, está formado principalmente por partículas con tamaños inferiores a 100 micras, que se desplazan sobre el océano Atlántico Norte, cada tres a cinco días, debido a las oscilaciones en los patrones del viento. 

Este polvo es transportado por aire caliente desde el desierto del Sahara, y desplazado hasta territorio estatal. La intensidad de este fenómeno depende de las condiciones climatológicas que prevalecen en el territorio africano.

Este año las entradas intermitentes de partículas se mantuvieron durante todo el mes de julio, y se espera continúen hasta mediados de agosto.


¿Qué contiene el polvo del Sahara?

Este polvo se encuentra formado por metales, microorganismos, sulfatos y compuestos de
nitrógeno
, entre otras especies químicas. 

Debido a su tamaño y cantidad, suelen resultar perjudiciales debido a la pérdida de visibilidad, incrementa las  alergias y enfermedades respiratorias, afectación de la flora y fauna de la región en donde se observa este fenómeno

La presencia de este polvo resulta benéfica en la disminución de huracanes o tormentas tropicales.


¿Cómo me puedo proteger?

Se recomienda evitar la exposición al aire libre, principalmente en personas con alergias o enfermedades respiratorias.

Las personas con asma y otras enfermedades pulmonares crónicas deberán extremar precauciones para mantener el control de sus condiciones subyacentes y reducir la exposición al polvo, limitando el tiempo que pasan al aire libre durante las tormentas de polvo.