La época de lluvias ha llegado y junto con ella aparecen las molestas goteras en los hogares, pero existen consejos prácticos para repararlas.
La Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), dio a conocer sencillos trucos para realizar mantenimiento en tu vivienda sin necesidad de gastar tanto.
Sin duda, tener goteras en el techo es uno de los peores flagelos que puede aparecer en el hogar o local comercial y es por eso por lo que debemos aprender cómo taparlas para terminar con este tipo de inconvenientes.
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De lo contrario, es muy probable que por esos agujeros se filtre mucha humedad y esto seguramente cause un deterioro severo en la propiedad, comprometiendo no solo su integridad sino también los muebles.
Además, la humedad en exceso puede repercutir en la salud de los habitantes de tu casa, especialmente si tienen enfermedades respiratorias, por eso te presentamos el siguiente tip fácil, sencillo y sobre todo, económico.
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¿Qué materiales necesitas para reparar las goteras?
- Guantes
- Cubeta
- 200 gramos de cemento gris
- 200 gramos de marmolina
- 150 mililitros de sellador líquido para impermeabilizar techos
- 500 mililitros de agua
- Escoba
- Palo de madera
- Brocha
- Espátula
Pasos para iniciar la reparación de tu techo
Antes de aplicar tu mezcla deberás hacerlo en el techo limpio y seco.
Revisa previamente el pronóstico del clima para que verifiques que no vaya a llover en unas horas, para que tu mezcla pueda secarse como es debido.
Retira el impermeabilizante desgastado o cualquier otro residuo de la zona afectada.
Vierte un poco de agua para que esté húmeda el área donde trabajarás.
En la cubeta vas a vaciar el cemento, la marmolina, el sellador y el agua, y con ayuda del palo de madera irás removiendo para que se integren todos los materiales.
Procura que la mezcla te quede un poco aguada para que pueda penetrar perfectamente en las grietas.
Vierte poco a poco la mezcla sobre la loza y barre uniformemente con la ayuda de la escoba.
Finalmente aplica la mezcla sobre aquellos lugares de difícil acceso con la espátula, sobre todo en esos espacios donde te has percatado de los escurrimientos en el hogar.