El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) y la Fundación Friedrich Nahumann analizaron las condiciones del país por regiones para atraer el nearshoring y determinaron que Nuevo León, Aguascalientes y Coahuila tienen un mejor desempeño que el resto de las entidades y cuentan con facilidades para aprovechar la tendencia de relocalización de cadenas productivas.
Estas entidades tienen más mano de obra calificada, mejores condiciones laborales y mejor infraestructura, sin embargo el acceso al agua es un reto.
En contraste, Oaxaca, Estado de México y Zacatecas son entidades cuyas condiciones estructurales dificultan la atracción de inversiones y el incremento de actividades económicas ligadas con el nearshoring.
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Respecto a la mano de obra calificada, señalaron que existe un mayor potencial para incrementarla en entidades como Guanajuato, Tlaxcala, Sinaloa y Durango; en Baja California Sur y Jalisco, por otra parte, el mercado laboral muestra una menor cantidad de personas disponibles y con interés en unirse a la población ocupada.
Los indicadores relativos a este factor toman en cuenta la disponibilidad de vivienda en las entidades y el acceso a los servicios básicos en los hogares, así como la cantidad de vehículos de transporte público que permitan conectar a los trabajadores con sus lugares de empleo. Incluso los programas gubernamentales de apoyo a las empresas y la seguridad pública son factores a analizar por parte de las empresas interesadas.
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Este diagnóstico es un punto de partida para trazar una ruta de trabajo a la medida, que atienda los pendientes prioritarios para cada entidad y genere las condiciones necesarias para impulsar el desarrollo regional en el país, concluyeron.