La creación de un negocio propio luego no resulta ser tan fácil como esperábamos, y es que involucra una serie de pasos para garantizar el éxito, además, ¿Sabías que existen tipos de emprendimiento?
Si la respuesta es no, seguro está información te interesa, pues te ayudará a identificar qué es lo mejor para arrancar con tu empresa.
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Y es que, ante los retos que enfrenta el dueño de un negocio, el objetivo es crear diferentes soluciones en las que se involucren la eficiencia e innovación.
En ese sentido, es importante conocer las características de las formas de emprender para desarrollar modelos de negocio se adecúen a lo que queremos ofrecer.
¿Qué es el emprendimiento?
Primero, repasemos el significado de este término, el cual, de acuerdo con la Universidad Autónoma de México (UNAM), refiere a la acción de iniciar un proceso.
"Implica todas las funciones, tareas y actividades asociadas a la percepción de oportunidades y a la creación estratégica de una organización para conseguirlas".
Por lo que, un emprendedor, es que aquella persona con una oportunidad de negocio y realiza todo lo necesario para crearlo.
Tipos de emprendimiento
Pequeños negocios
Ocurre cuando el dueño es el único que dirige la compañía y solo cuenta con un bajo número de empleados.
Estos son los que usualmente se observan sobre las calles, que suelen ser rentables para los trabajadores, incluido el propietario y así mantengas las necesidades básicas de las familias.
Empresas escalables
Estas se caracterizan por no solo querer ser una organización rentable, sino ven mucho más allá, por lo que procuran crecer exponencialmente.
Debido a ello, los propietarios se enfocan en innovar y buenas estrategias, que requieren de un buen financiamiento para expandir su empresa lo más rápido posible.
Sin embargo, por lo regular en estas destacan las del ámbito tecnológico y desarrollo de software.
Compañías sociales y humanistas
Si bien, se diferencian porque su objetivo principal no es la obtención de ingresos, pretenden generar un impacto a nivel mundial.
Pese a que las ganancias pueden venir acompañadas de su finalidad, por lo regular son empresas sin fines de lucro que se enfocan en sectores de derechos humanos, medio ambiente, salud o educación.
Grandes empresas
Tienen la visión de convertirse en líderes de su mercado manteniéndose siempre en tendencia.
De esta forma, logran su reconocimiento internacional y se mantienen sólidas en el mercado.
Emprendimientos novedosos
Como su nombre lo dice, se trata de ofrecer un producto o servicio completamente innovador, por lo que el esfuerzo sobre investigaciones puede ser mayor.
Asimismo, suelen generar mayor impacto, mientras lo que brindan satisfaga las necesidades de los consumidores, aunque requieren de una gran inversión para el proceso.
Compañías incubadoras
Mientras algunos empresarios buscan crecer rápidamente, estas se caracterizan por mantener un periodo de tiempo largo para el desarrollo de su producto o servicio.
Pues las grandes organizaciones recurren a las incubadoras de ideas para asegurarse que su idea de negocio dará resultados.
Empresas espejo
Su nombre hace referencia a que, son esos negocios que no brindan algo innovador, pues su enfoque están en productos o servicios que ya se encuentran en el mercado.
Un ejemplo de ello son las franquicias, en las que, empresas exitosas como Starbucks, tienen garantizadas las ventas, aunque tampoco hay que dejarse llevar por eso.
Negocios oportunistas
Al detectar una necesidad momentánea, los propietarios aprovechan para sacar adelante su empresa, la cual está diseñada solo para esa ocasión.
No obstante, se requiere estar atento para llegar a tiempo al momento adecuado y poner en marcha el negocio.
Ahora, ya sabes cuáles son los tipos de emprendimiento, no dudes en identificar cuál se acopla más a tu negocio y arráncalo.