CANES

¡Los perrihijos primero! Dale una vida 'de lujo' sin gastar mucho

Tener un perro debe considerarse una decisión de por vida y, antes de decidirse, es importante tener presente los costos de mantener a una mascota para valorar el esfuerzo económico que requerirá.

Perro de raza pequeña.
Perro de raza pequeña. Créditos: Pixabay
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Cuando una persona se hace cargo de un perro debe saber que la vida le va a cambiar. Este animal puede aportar lealtad, protección y amor a su dueño, y éste debe comprometerse a cuidarlo y darle lo mejor, para que el can sea feliz y esté sano, señalan desde el comparador de precios idealo.es.

Uno de los mayores gastos habituales es la comida canina. El coste anual de la alimentación de los perros de mayor tamaño puede llegar a cuadruplicar el coste de la comida que consumen los perros de razas de pequeñas dimensiones”, según el experto Kike Aganzo, de idealo.

Otro de los gastos imprevistos más clásicos proviene de tener que acudir al veterinario, lo cual se tiene que sumar al coste de las vacunas, el microchip de identificación, los controles periódicos de su salud y los medicamentos”, puntualiza Aganzo.

¿Qué es lo más caro de tener un perro?

Afeitadoras caninas, transportines, accesorios como casetas y bozales, comida, cama y cesta, correas y arneses, juguetes, productos ‘premium’ para mascotas, como los localizadores por GPS o las piscinas para perros, sin olvidar las vacunas, los microchip, las visitas al veterinario y los medicamentos.

Estos son algunos de los gastos en productos y servicios, ya sean habituales, periódicos o inesperados, que implica mantener un perro como mascota, según explican desde la plataforma de comparación de precios en línea idealo.

Los gastos extra y el compromiso que implica tener un can suponen un esfuerzo económico que nunca será comparable con el infinito amor y fidelidad que nos dará ese animal, pero es fundamental conocerlos, analizarlos y valorarlos de antemano, porque adoptar un perro es una decisión de por vida”, indica Kike Aganzo, responsable de comunicación la mencionada empresa.

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Estos costes repercutirán en la economía del propietario del perro, independientemente de que adquiera al animal en un establecimiento o lo adopte en una protectora de animales, si bien Aganzo considera que “es preferible la adopción, dada la enorme cifra de perros que cada año son comprados y más tarde abandonados, en muchos países”. 

Por ejemplo, durante 2020 llegaron a los centros de acogida y entidades protectoras de animales de compañía de España alrededor de 162.000 perros, siendo el abandono uno de los principales problemas, según el estudio “Él nunca lo haría”, de la Fundación Affinity.  

Perros en situación de calle

De acuerdo a ese estudio, publicado en 2021 los factores económicos son el principal motivo de abandono de los perros en ese país, estando presente en un 25% de los casos de animales recogidos.

Consultado por EFE sobre a qué tipo de perros cuesta más la manutención, Aganzo señala: “cubrir las necesidades y el cuidado de uno de ‘estos tiernos peludos’ depende de muchos factores, y uno de los aspectos clave es el tamaño del animal”.

Explica que en ese sentido “uno de los mayores gastos que requiere el cuidado de un perro es su comida diaria”.

“La alimentación de los perros es vital para su estado de salud y de ánimo, por lo que debe ser equilibrada, saludable y aportar los nutrientes, vitaminas y minerales que necesitan”, según Aganzo.

Señala que los piensos, la comida húmeda y los ‘snacks’ son los alimentos preferidos por los dueños y por los propios animales. 

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Además, los fabricantes han creado productos específicos para cada animal teniendo en cuenta la edad y el peso, ya que la alimentación de un cachorro muy pequeño es muy diferente de la de un animal adulto en plena forma física, puntualiza.

“Existen grandes diferencias dependiendo del tipo de animal: no es lo mismo dar de comer en casa a un pastor alemán, que a un yorkshire terrier”, matiza.

El coste anual de la alimentación de los de perros de raza grande puede llegar a cuadruplicar el coste del pienso que consumen los canes de razas de pequeñas dimensiones”, según Aganzo.

Respecto de los gastos habituales y esporádicos que implica la tenencia de un perro, este experto señala que “además de la alimentación, una mascota canina también requiere que su propietario destine dinero regularmente a cuidar la salud del animal”.

“Por otra parte, uno de los gastos imprevistos más clásicos proviene de tener que acudir al veterinario, no como control, sino de forma extraordinaria por alguna incidencia”, añade Aganzo.

“Asimismo, a esto hay que sumarle el coste de las vacunas para los perros, de la implantación del microchip subcutáneo de identificación, de las consultas para el control periódico de salud, y en ocasiones, la compra de medicamentos”, apunta.

También apunta otros costes adicionales, como contratar un seguro de responsabilidad civil y asistencia veterinaria, porque, según indica: “la higiene y cuidado de un perro requiere adquirir productos como champús para bañarlos, cepillos para eliminar los pelos sueltos y las suciedades, así como juguetes especiales para que muerdan y fortalezcan su dentadura”.

Consejos para no gastar tanto en tu perrihijo

A la pregunta de ¿en qué tipo de gastos se puede ahorrar más dinero? Aganzo responde que depende mucho del dueño y de los caprichos que le conceda a su mascota, pero donde más se puede economizar, comparando precios y comprando adecuadamente, encontramos los juguetes, los arneses y las correas”-

“Uno de los productos que más se suelen comprar para nuestro can de compañía son los peluches, siendo además uno de los elementos más baratos para regalar a las mascotas”, según este experto. 

Para gastar menos en el mantenimiento de un perro comprando a través de internet, Aganzo recomienda como buena práctica utilizar un comparador de precios y ofertas en línea.

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Señala que cotejar los diferentes valores de los productos y servicios permite a los usuarios maximizar el ahorro.

De este modo, “los dueños de mascotas pueden ahorrar en camas para el perro, ‘kennel’ (caseta para el perro), juguetes e incluso en comida, si se organizan con antelación, ya que no suelen ser productos de necesidad inmediata”, explica Aganzo.

Afrontar los gastos de un perro doméstico, también es una cuestión de actitud, según Aganzo. 

“A lo largo de décadas se ha ratificado cada vez más la idea de que el perro es el mejor amigo del hombre, y, generalmente, cuando una persona adquiere uno de estos animales, ya se hecho a la idea de que esto representará un gasto y una responsabilidad importantes a medio y largo plazo”, señala.

“Cuando un gasto es planificado, se hace mucho más fácil gestionarlo y afrontarlo de forma positiva”, concluye.
Daniel Galilea.