HISTORIA

Abrazo de Acatempan: El gesto de reconciliación que dio origen a una nación

Este hecho histórico marcó el inicio de la consolidación de una nueva nación, el México independiente.

Abrazo de Acatempan entre Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero.
Abrazo de Acatempan entre Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero.Créditos: Foto: Especial
Escrito en TENDENCIAS el

Uno de los hechos históricos más destacados en México fue el llamada Abrazo de Acatempan, el cual más allá de un gesto de reconciliación y cordialidad, fue un pacto que dio origen a una nación.

Tras el inicio de los conflictos por la independencia de México, tras el llamado del cura Miguel Hidalgo para sublevarse a la dominación española, vino una etapa de inestabilidad política, social y económica, vino una etapa de inestabilidad que culminó casi una década después.

El 10 de febrero de 1821 se dio el llamado Abrazo de Acatempan, el cual era el inicio del fin del conflicto independentista.

¿Qué fue el Abrazo de Acatempan?

Se trató de un gesto de reconciliación entre los realistas y las fuerzas independentistas mexicanas, que tuvo lugar el 10 de febrero de 1821 en el poblado llamado Acatempan, localizado en lo que ahora es el estado de Guerrero.

Este hecho histórico fue protagonizado por Agustín de Iturbide, comandante del ejército del Virreinato de Nueva España, y Vicente Guerrero, uno de los jefes de las fuerzas insurgentes que desde 1810 luchaban para proclamar la Independencia de México.

Este abrazo tuvo una trascendencia histórica, ya que posibilitó la formación del Ejército Trigarante, integrado por independentistas y antiguos realistas y luchó contra quienes se negaban a aceptar la Independencia de México.

Nacimiento de una nación

Agustín de Iturbide, era el comandante del ejército del Virreinato de la Nueva España, el cual en noviembre de 1820 recibió órdenes del virrey Apodaca de buscar a los independentistas que no habían aceptado su indulto y ponerlos fuera de combate.

Durante la búsqueda de los insurgentes, Iturbide intercambió cartas con Vicente Guerrero, uno de los más importantes comandantes independentistas, a quien le pidió que depusiera las armas; pero se negó a capitular.

Tras varios encuentros militares favorables a los insurgentes y nuevos intercambios epistolares, Iturbide propuso a Guerrero un encuentro cara a cara en Acatempan, el 10 de febrero de 1821.

Este se conoció como el Abrazo de Acatempan y pasó a la historia mexicana como el gesto de reconciliación entre bandos contrarios que dio