El ajolote es un anfibio endémico del Valle de México, el cual conserva sus rasgos larvales cuando es adulto, a esto se le llama neotenia, de igual modo, conserva su aleta dorsal, la cual, recorre todo su cuerpo, así como sus branquias externas, que sobresalen de la parte de atrás de su cabeza como plumas.
A diferencia de otras salamandras este pasa la mayor parte de su vida en el agua. Actualmente se encuentra únicamente en la Ciudad de México, en la red acuífera de Xochimilco. Tiene una estatura media de 15 centímetros; sin embargo, puede llegar a medir hasta 30 cm.
Su color casi siempre es negro, marrón o moteado, puede llegar a vivir hasta 15 años. Se alimenta de moluscos, gusanos, larvas de insectos, crustáceos, peces y tiene la particular característica de ser un gran predador.
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La preservación del ajolote se dio desde el año 2006, cuando la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) clasificó al ajolote mexicano como uno de los animales en peligro de extinción debido a la contaminación de su hábitat ocasionada por el uso de fertilizantes químicos.
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¿Cómo podemos proteger al Ajolote?
Se crearon las siguientes leyes que pretenden contribuir al cuidado del hábitat del Ajolote y el aprovechamiento adecuado de los recursos naturales:
- La Ley General de Vida Silvestre tiene como objetivo establecer la concurrencia de los gobiernos federal, estados y de los municipios, relativa a la conservación y aprovechamiento sustentable de la vida silvestre y su hábitat en el territorio mexicano.
- Centro de Investigación Biológicas y Acuícolas de Cuemanco (CIBAC): Espacio de desarrollo científico, académico y ecológico ambiental de la Universidad Autónoma Metropolitana, el cual tiene como propósito conservar la cuenca de Xochimilco.
- Cuenta con una colonia de ajolotes, la cual es una Unidad de Manejo Ambiental (UMA), que permite la conservación, reproducción y protección del Ajolote legalmente.
¿Cuál es la leyenda del ajolote?
El ajolote ha estado presente en la historia de México, desde tiempos inmemorables, sin embargo, se desconoce el origen exacto de este anfibio y es así como surgen dos leyendas.
La primera habla del gran dios Xolotl (hermano de Quetzalcóatl) que para no ser sacrificado se escondió transformándose en maíz y luego maguey, sin embargo, lo descubrieron, él se refugió en el agua y se convirtió en axolotl. Quetzalcóatl lo encontró y de castigo por negarse a morir, hizo que permaneciera por toda su vida en el agua, por eso el nombre del ajolote (ambystoma mexicanum).
La segunda habla del axolote que aparece ligado a los más antiguos mitos mexicas. En la leyenda del quinto sol se indica que en la ciudad sagrada de Teotihuacán los aztecas creían que cuando Nanahuatzin y Tecuciztécatl se tiraron a la hoguera se convirtieron en el sol y la luna respectivamente; los dioses, al darse cuenta de que el sol y los astros seguían sin moverse, decidieron morir también, pero hubo uno, Xólotl, que se negó al sacrificio.
Xólotl es un dios que le tiene miedo a la muerte y no la acepta. Por ello escapa del sacrificio mediante sus poderes de transformación. Primero se convirtió en maíz, pero el verdugo lo encontró; se escapó nuevamente y se transformó en maguey, pero fue encontrado una vez más. Finalmente se transformó en ajolote, forma en la que encontró la muerte.
Ahora ya conoces el origen del ajolote, recuerda que es muy importante cuidar su preservación para que siga siendo parte de nuestro planeta. Para temas relacionados escucha “Amores de Garra” todos los sábados a las 14:00 horas a través del 102.5 FM.