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A veces somos seres demasiado racionales e intentamos controlar cada una de las variables que nos rodean. Pretendemos eliminar, de esta manera, la incertidumbre; queremos tener todo bajo control. Luego, algo pasa y todos nuestros planes se vienen abajo… es como si el universo tuviera otro camino. Una coincidencia, o sincronicidad, nos lleva de pronto a preguntarnos si todo estaba ya predefinido. Hoy quiero compartir contigo una historia en la que de pronto todo cambió y las cosas tomaron otro rumbo y todo ello fue para bien.
José Eduardo Canales tenía una gran ilusión; quería ser futbolista profesional. Lo intentó y lo cumplió, hasta cierto punto. Participó en algunas categorías de América y Pumas; y no encontró ahí lugar para la Primera División. El mundo deportivo es complejo y a veces el privilegio no es para todos.
Aquí es donde la historia hace un giro y el azar lo lleva hacia la magia: José Canales, mejor conocido hoy como Jo Canales, encontró su camino en Puebla, su ciudad natal. Te comparto esta historia.
Isidro Sánchez, hijo del director técnico José Luis Sánchez, el Chelis, tenía un gimnasio de Crossfit. Canales vio fotos de él y le llamaron la atención, así que lo visitó y comenzó a entrenar con él para mantenerse en buena forma. Una cosa llevó a la otra y así, Canales decidió certificarse en crossfit y profundizar en el tema de la preparación física. Luego se certificó en biomecánica, ciencia que le permite apreciar el movimiento del cuerpo humano con relación al deporte.
Así, abrió su propio gimnasio. No se alejó del ambiente futbolístico del todo, pues trabajó con jugadores como Hugo González y Diego Reyes, cuando militaban en el América, y en 2017 conoció a Javier Hernández. Con 'Chicharito' hizo un trabajo particular, justamente, en el gimnasio del piloto de Fórmula 1, Sergio Pérez. Así, conoció al piloto tapatío, que en ese momento competía por Force India y un año después se marchó a Racing Point.
“Empezamos primero a hacer unos pequeños trabajos con Checo, quien luego me incluyó en su equipo”, afirma Canales. Dice el entrenador de nuestro querido Checo, que sobre todo, lo motivan las demandas físicas que tiene el piloto en su deporte, porque se trata de un entrenamiento muy diferente.
Además de futbol y automovilismo, José Canales trabajó también con golfistas y con triatletas. Con Checo trabaja, sobre todo, la fuerza en el cuello, el tema de las fuerzas G, es decir, la fuerza que empuja a una persona hacia adelante sin que nadie lo empuje y el tema de los choques. Su labor no se trata solo de poner a punto al piloto, sino también procurar que se recupere de forma óptima y lo más rápido posible.
El trabajo de Jo es bueno para ambos. Checo ha recolectado diferentes triunfos que en parte se entienden por el exhaustivo trabajo físico que él y su entrenador profesional realizan. “Poder ver a México en alto de tan cerca y poder aportar mi granito de arena a un deporte tan importante siempre es de orgullo y de mucha pasión”, señaló Canales.
Jo Canales tiene la mente fija en lo suyo: quiere pisar fuerte en el Pádel, deporte de paleta con origen en nuestro país y brindar un mejor servicio en las canchas públicas que su natal Puebla ha implementado en la ciudad. También sueña en participar con México para Juegos Olímpicos como entrenador de alto rendimiento en algún deporte.