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¿Qué autoridades te pueden multar según el Reglamento de Tránsito de Monterrey?

El reglamento establece no solo las normas de vialidad, sino también la jerarquía de preferencia y las autoridades que pueden llegar a infraccionarte.

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El reglamento de Tránsito de Monterrey indica todas aquellas normas respecto al ascenso y descenso de pasajeros o de carga y descarga, así como movimientos de circulación, estacionamiento, seguridad y además, la jerarquía respecto al desplazamiento de peatones, automovilistas, ciclistas, motociclistas, entre otros. 

¿Cuáles son las infracciones más comunes? 

  1. Violar los límites de velocidad, ya sea en carreteras federales o en áreas urbanas.
  2.  Conducir bajo la influencia del alcohol.
  3. Transitar en sentido contrario al flujo vehicular.
  4. Estacionarse de manera inapropiada, incluyendo doble fila, obstrucción de entradas, invasión de zonas peatonales o aparcamiento en lugares designados para personas con discapacidades.
  5. Circular sin la tarjeta de circulación correspondiente.
  6. Conducir sin poseer una licencia o permiso de conducción válido.
  7. No utilizar el cinturón de seguridad mientras se conduce.
  8. Omisión en el uso de señales y luces direccionales.
  9. Desobedecer las señales del semáforo y otros indicadores de tránsito.
  10. No utilizar casco, luz o reflectores cuando se viaja en bicicleta o motocicleta.

¿Quiénes pueden multarte? 

De acuerdo al reglamento de Tránsito de Monterrey, las multas pueden ser interpuestas, de acuerdo a sus competencias, por las siguientes autoridades: 

  • El Presidente Municipal 
  • El Comisario General de la Secretaria de Seguridad Pública y Vialidad
  • El Director de Tránsito y Vialidad
  • Los Policías de Tránsito
  • Todo aquel personal autorizado por el Presidente Municipal

¿Quién tiene preferencia de circulación? 

En las calles de Monterrey, la preferencia para la circulación sigue una jerarquía que prioriza a los peatones, otorgándoles el derecho principal de transitar de manera segura; les siguen en importancia ciclistas y motociclistas; posteriormente, se brinda consideración a usuarios y prestadores del servicio de transporte público, luego los conductores particulares y finalmente a los prestadores de servicios de carga. 

La responsabilidad al volante no solo implica cumplir con las normas de tránsito, sino también mantener una atención constante y respetar las condiciones viales del entorno.